El Maestro De Mi Hijo - KookMin

Capítulo 46 - El reencuentro

Londres

-COLE JUNGWON, COLE- Gyeomie se carcajeó y Jungwon la lanzó al aire, haciéndola reírse aun más. Hoseok, el novio de Rosé, corrió, gruñendo como un ogro y Jungwon se escondió tras el sofá, mientras que Gyeomie se tapaba la boca y ahogaba sus risas, escondida junto a su hermano.

-¿Ya si fue?- Susurró la pequeña riéndose. Jungwon se puso un dedo en su boca.

-Shh Gyeomie. Calla que va a atraparnos- Susurró Jungwon. Gyeomie se cruzó de brazos y dijo:

-Pometiste jugal conmigo a las muñecas- Jungwon se sonrojo nervioso y le dijo

-Soy un niño.

-Y yo una niña. La más helmosa del mundo, así que yo mando y tu obedeces- Replicó Gyeomie y tomando una almohada que estaba tirada en el piso, se puso de pie gritando:

-Voy a hacelte pule, monstlo malo- Hoseok se dejó caer en el suelo y gritó de forma dramática

-NOOO

-Soy la malcianita más bella del mundo y soy espacial así que voy a hacelte pule- Gritó Gyeomie golpeando a Hoseok, quién fingió estar muerto, con la lengua de fuera. Gyeomie se rio mientras caminaba hacia él, quien estaba en el suelo. Le golpeó la pantorrilla y Hoseok no se movió. Gyeomie lo rodeó hasta estar a la altura de su cara y Hoseok saltó, haciéndola gritar asustada, mientras la alzaba en sus brazos y Jungwon se reía, tirado en el suelo, cogiéndose con las manos el estómago, porque estaba feliz, más que feliz.

.

.

Los Ángeles

- ¿Crees que Jungkook consiga solucionar las cosas con Jungwon? – Seohyun preguntó a su marido, quién se encontraba recostado en el sillón, con el periódico abierto.

Min Ho dobló el periódico y se levantó para abrazar a su mujer.

- Eso espero cariño. Estos años han sido un infierno para todos, pero por muy frío que parezca Jungkook, sé que ha sufrido muchísimo. Su mayor temor se cumplió cuando esa mujer dio la cara. Perdió a su hijo y no puedo hacer nada para evitarlo.

Seohyun ocultó su cara en el pecho de su marido, rezando fervientemente para que todo esto acabara y pudieran ser una familia otra vez.

- Fue lo mejor que pudo hacer. El dejarlo irse a Londres. Con esa mujer por aquí, Jungwon no estaba seguro. Pero eso no quiere decir que él no lo quisiera a su lado...

Un fuerte estruendo se oyó fuera de la estancia, seguida por un remolino de actividad que los dejó impactados.

- ¡Ya estoy aquí! – Dahyun gritó todo lo fuerte que pudo

Seohyun se enderezó, intentando ocultar su estado de ánimo, pero Dahyun era lo suficientemente perspicaz como para darse cuenta de que las cosas no estaban bien.

-¿Qué sucede? – preguntó preocupada, bajando la voz hasta hacerla soportable para los que estaban en la estancia.

- Nada cariño. Una, que se hace mayor y piensa cosas que no debería. – Seohyun intentó sonreír, pero no le salía.

Dahyun se acercó a ella y la abrazó con fuerza. Una vez que se separaron, la miró a los ojos:

- Bien, ahora estas mejor. ¿Vas a decirme qué es lo que realmente ocurre? – Seohyun pensó que por mucho que lo intentara Dahyun no lo dejaría estar, así que se resigno a compartir sus preocupaciones.

- Hablábamos de Jungkook y Jungwon. – dijo eso con un suspiro y se sentó en el reposabrazos del sillón de su marido. – No sé si conseguirán solucionar este distanciamiento que tienen.