XVIII [Segunda Parte]

420 30 0
                                    

Todos se despidieron tanto de mí como de Jacob y entre ellos mismos porque todos vivían lejos uno del otro así como también saludaron a Brad, que se notaba a kilómetros que no se sentía muy bien con la situación.

-Creo que yo también me voy.- Dijo Jacob.

En ese momento llega mi madre a la casa que al parecer salió temprano del trabajo. ¡¡Qué bueno!! (Si se nota la ironía algo está mal con este mundo)

-Jacob querido, hace cuánto tiempo no te veo.

No me pregunte porque mi mama le dice ‘’querido’’ a cualquiera.

-Lo mismo digo mama de Janel, pero ahora ya me voy.

Tampoco me pregunten porque Jacob siempre le dice ‘’mama de Janel’’.

Ambos se saludaron y mi madre entro como si nada, como si nunca hubiese notado la presencia de Brad.

-Hija entra rápido a la casa que hace frio y esta oscuro.- Me dijo antes de cerrar la puerta.

Sí que noto la presencia de Brad sino para que me lo va a decir. Me cae mal.

-Te dejo lo que querías. – Me dijo Brad sacando de su bolso unas cuantas hojas mirando al piso.

-Brad no te enojes.- Dije. Lo más estúpido que salió de mi boca en toda mi vida, ya estaba enojado.

-¿Cómo quieres que no me enoje si cuando yo quiero estar contigo estas castigada y no te dejan salir pero siempre te veo con otros por el parque o juntándose aquí en tu casa? ¿Qué es esto?- Me dijo y podía notar lo frustrado que estaba con la situación.

-No puedo decírtelo.- Dije con los ojos llorosos.

-Esto tiene que ser una broma.- Dijo el, se removía los rulos.

-Brad por favor.- Dije casi suplicando.

-Tú conoces a mi madre, a mi padre y hasta lo más sagrado que tengo en esta vida.

-No conozco a tu hermana.

-Me refería a mi perro. Yo ni siquiera conozco a tu mama.- También estaba herido con como lo había ignorado ésta.

-No creerás que es una buena situación. –Dije. No es por el sino por ella.

-No claro que no lo creo. ¿Sabes que es lo que más me enoja de esto?

Me dio el espacio para que responda ‘’ ¿Qué?’ pero no lo hice.

-Que no debería enojarme porque no somos nada y no soy quien para estar hablándote así.

Era lo peor que me podría haber dicho. No éramos nada.

Se fue caminando rápido y perdí su silueta en la oscuridad. Escuche un segundo llamado de mi madre para que entrara a la casa y esta vez lo hice.

-¿Quién era el chico de rulos?- Mi madre me preguntaba mientras se secaba las manos.

-Así que si lo viste. ¿Por qué no lo saludaste?- Le respondí, estaba tan enojada.

-Es que estaba Jacob…- Respondió, era tan obvio que iba a decirme eso.

Jacob para ella es el hijo que siempre hubiese querido tener, pero en cambio nos tuvo a mi hermano y a mí. No me alcanzan los dedos de la mano para enumerar las veces que comparo a mi amigo con Brandon, a veces era tan cruel.

rocket ship [b.s]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora