IV

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Otro día empezaba pero esta vez me desperté por el sonido del maldito despertador, mi mayor enemigo en este mundo y posiblemente el único. Realmente es un aparato que puede sacar la parte más violenta de ti misma.

Me levante con menos ganas que ayer, pero eso no significaba que no estuviera emocionada. Sentía que todos los nervios y las preguntas que tenía en mi cabeza desaparecieron en cuanto vi sus sonrisas y lo bien que me recibieron, me sentía hasta como mas liviana de no tener tanta presión.

Hice mi "rutina'' matutina (le pongo las comillas solo porque la implemento desde hace dos días pero será mi rutina de ahora en más) que consistía en ducharme, peinarme un poco, elegir el outfit del día que consistía en un short de jean tiro alta combinado con una blusa blanca suelta, unas botas cortas y una cadenita que tenía un dije de un corazón que mi madre me había regalado y que en la parte de atrás tenía una inscripción que solo ella y yo sabemos, era algo así como nuestro secreto. Luego de eso, solo voy a verme al espejo y aplicar el maquillaje que creo necesario, lo que hoy fue rímel y lápiz labial de un color que desconozco totalmente el nombre pero llamémoslo ''rosa clarito''.

Baje a desayunar y vi el reloj para saber que tenía suficiente tiempo para comer algo y luego ir por la... bicicleta. Y aquí vamos mi inteligencia y mí cuidado con mis pertenencias, pero sobre todo: Mi memoria. ¿Cómo es que en ningún momento mientras ayer volvía a casa con Jacob se me ocurrió pensar en que fui a la escuela con mi bicicleta? A este paso nunca conseguiré que respeten a las rubias.

Comí unas tostadas junto a mi café con leche, y luego de despedirme de mis padres, salí de la casa para ponerme rápido en marcha ya que como tendría que ir caminando y como mi caminata consta en pedirle ayuda a un pie para mover el otro, no tendría mucho tiempo. Cuando llegue vi a Jacob y me apresure para alcanzarlo, y así poder ir a saludar al resto del grupo y ver si mi bicicleta todavía estaba en donde la había dejado estacionada con el candado.

- Gracias a un idiota olvide mi bicicleta ayer – Le dije mientras estaba al lado de él pero sin dejar de mirar al frente.

- Supongo que ese idiota te tenia embobada con sus encantos – Dijo y me miro como seduciendome. A veces me asustaba.

- Acompáñame a ver que es de la existencia de mi bicicleta y luego vamos a saludar al grupo antes de que toque el timbre.- Dije.

- Janel, preciosa, eres la única que en la actualidad usa la bicicleta en esta escuela y me arriesgaría a decir que en toda la ciudad. ¿Quién querría robártela?- Me pregunto él.

Y si, tenía razón. La bicicleta estaba ahí, tal cual como la había dejado así que ni bien la vi cambiamos de camino para ver al resto de los chicos. Cuando llegamos saludamos a todos y obviamente a Brad, al cual estoy tratando de tomarlo como que es uno más de nosotros. Me sorprendió bastante en la manera descarada que me miro a mí para luego mirar a Jacob y luego volver la mirada a mí, pero eso no era todo ¡ME GUIÑO UN OJO! Y luego se despidió de todos y nos dijo que nos vería en el break, es tan raro. Pero hay algo que me llamo la atención: Hoy tenía sus rulos cubiertos por un beanie... en primavera. Repito, es tan raro.

Les pedí a todos que me agenden sus números de teléfonos en mi iPhone ya que era nuevo, y justo después de eso sonó el timbre. Hoy me tocaba Historia Europea en las primeras dos horas, todo un dolor de cabeza pero al menos estaba con Becca, Melissa y Claire. Melissa era la más aplicada de todas mientras que Becca la más holgazana para estudiar, lo cual nos mantiene a Claire y a mí en el medio de los extremos.

Entramos al aula y nos ubicamos en el fondo (como siempre), la clase empezó con un profesor nuevo ''Robert Fletcher'' quien para mi opinión es demasiado viejo para usar ese tipo de camisas al cuerpo y esos anteojos que lo hacen lucir totalmente ridículo. Pero al parecer soy la única que piensa así ya que las de los primeros bancos están a punto de saltarle al cuello. Es por eso que no me aprendo sus nombres.

Esas dos horas fueron una tortura, no debería ser legal que las horas pasen tan lento. Las chicas van a buscar algo para comer en la cafetería porque ninguna había desayunado pero como yo si lo había hecho me dirigí directamente afuera para encontrar a los chicos. Y a mí desgracia al único que vi era a Brad mirando hacia todos lados como preocupado por si alguien lo viera así que me acerque a él.

Bien Janel, trata de ser buena.

-Sí que golpee tu ego eh- dije sin preocupación sentándome al lado de él.

-¿Disculpa?- Me miro frunciendo el ceño.

-Por el gorro en tu cabeza. – se lo señale y el hizo una mueca graciosa.

Intento fallido en ser amable, otra vez será.

- Me encantaría que alguna vez no empieces una conversación refiriéndote a mi pelo sabes - Suspiro frustrado- Lo notaste, sí, creo que tengo que tomarlo como una indirecta ya que no eres así de agresiva con todos. Debo alejarme de ti, un amigo una vez me dijo que las rubias estaban locas.

-Hey, no soy agresiva, me acerque hasta aquí para hablar contigo, totalmente en paz. – Le dije fingiendo un tono hippie drogado - ¿Tenias amigos? ¿Con ese pelo? Es decir, el claramente era un amigo de fierro.

El rio con esa carcajada ruidosa, no quería admitirlo pero de perfil con el beanie y riéndose lo hacían ver realmente tierno. Me tengo que calmar.

- Y ahí estas, otra vez, déjame tranquilo o me terminare rapando. –dijo fingiendo verse afectado por mi comentario. – O peor, le diré a mi mama.

Creo que llore de la risa. Agradezco que todavía exista la gente con humor sino no tendría amigos y todos me odiarían por no tomar mis comentarios como bromas.

-Discúlpame, y por cierto, vine porque quiero me agendes tu numero... por si alguna vez necesito ayuda y tú eres la última persona en el mundo y tenga que llamarte.- Dije.

Estaba en mi mayor intento por no sonar interesada en él. 

-¿Así que viniste por eso?-Me pregunto Brad interesado.

-Sí, creo que el beanie no deja conectar tus neuronas porque es eso lo que dije.-Respondí.

-Creo que te acercaste por que no puedes resistirte a mis rulos, y querías venir a agredirme –puso sus dedos en forma de comillas para la última palabra- Porque te encanto y no te culpo, suele pasar.

-Wow, eso sí que es tener un gran ego. ¿Realmente no puedo venir simplemente a pedir tu maldito número como se lo pedí a todo el grupo?- Dije algo indignada.

-No, porque ya tienes el mio.-Dijo el con calma.

No claramente no.

- Por el mensaje de ayer, te mande un mensaje y hasta me lo has respondido. ¿Por qué no lo agendaste anoche?- me miro con una mirada de satisfacción dándome a entender que él había ganado esta partida.

Janel 1 – Brad 1

A veces simplemente tienes que callarte y dar la razón.

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N/A: Hola, en el multimedia les dejo ''Bind your love'' de mi amada Cher Lloyd. Quizás no tenga nada que ver a la relación de los personajes ahora pero si lo tendrá en un futuro y ademas es un capitulo es algo divertido como el ritmo de la canción.

Espero que les haya gustado, gracias por leer. :)

rocket ship [b.s]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora