Camino de Asura celestial [Terminada]

Capítulo 73: La llama inmortal de la humanidad

Percy estaba en el Olimpo, rodeado del resto de dioses que lo miraban con asombro, enojo y muchas otras emociones. Sin embargo, el no hacía caso, simplemente estaba mirando hacía delante, donde estaba Hestia concentrándose. Percy tenía una pequeña sonrisa divertida mientras esperaba las palabras de Hestia.

Oh, si funcionaba como esperaba, entonces sería genial. Lo que estaba por ocurrir era una de las cosas que más lo impresionaba de la humanidad. Ya lo había vivido antes, pero verlo desde esta perspectiva debería ser algo impresionante.

"¡Mi nombre es Hestia, Diosa Olimpica del corazón, el hogar y la familia! ¡Por favor, escuchen mis palabras, hijos del hombre!", ante sus palabras, al igual que Percy, su figura había aparecido en las mentes y corazones de todos los humanos mortales del mundo. Sus ojos rojo fuego brillaban cálidamente, mientras su cabello castaño ondeaba suavemente, al igual que su vestido marrón.

"Esta situación actual no debería de haber sucedido, me disculpo sinceramente con ustedes. Nosotros los dioses, hemos estado escondidos de la humanidad mortal porque no pensábamos que fuéramos necesarios en las creencias de la era actual. Sin embargo, ahora mismo, un plano diferente ha invadido la Tierra, trayendo monstruos, desastres y muerte a sus hogares"

Las palabras de Hestia confundieron un poco a los humanos, algunos asustados, otros sin creer totalmente y, algunos pocos asombrados y sus mentes llenos de preguntas. Pero la sinceridad y suavidad en la voz de Hestia causo que se fueran calmando poco a poco. Si Percy les había causado a muchos la vitalidad y mentalidad para vivir más, Hestia estaba causando que sus corazones se calmen lentamente mientras el miedo desaparecía.

"En el pasado... ", Hestia continuó lentamente, y fue como si el tiempo se hubiera detenido mientras hablaba: "Los mortales hacían ofrendas hacía los dioses; algunos por pura adoración o respeto, otros por miedo. Pero, esa era ya es parte del pasado. Los humanos, ustedes, han crecido y se han mantenido erguidos por si mismos"

"¿Dejaran que todos sus esfuerzos por evolucionar y mantener su raza por varias eras sea desperdiciada? ¡El Dios Asura les ha dado el poder para oponerse al destino y sus enemigos! ¡Ahora solo tienen que pararse erguidos, orgullosos de su humanidad y enfrentarse a los monstruosos enemigos que tienen delante de ustedes!"

En ese momento, otra figura apareció en la mente de todos. Era Artemisa, levantando la mano mientras dejaba caer pequeñas luces que comenzaron a curar a los humanos e incluso sacando de las puertas de la muerte a casi todos los que estaban por morir. Poco después, apareció otra mujer, disparando flechas de rayos desde un hermoso arco mientras un grupo de cazadoras la seguía para ayudar a los humanos mortales.

"El Dios Asura y sus compañeros de la raza de bestias, la Diosa de la vida, la diosa de la casa... incluso yo misma; ustedes tienen el apoyo de dioses"

"¡Entonces levántense, hijos de la humanidad!"

"¡¿Dejaran que sus hijos mueran?! ¡¿Dejaran que sus familias perezcan?!", Hestia exclamo, causando que todos recordaran a sus preciadas y amadas personas. Sus corazones latieron con fuerza mientras sentían que una extraña sensación se extendía desde el corazón y se esparcía por sus cuerpos.

"¡No! ¡Los he visto por todas las eras, ustedes no dejaran que algo así suceda!"

"¡Entonces levántense! ¡Padres, madres, ancianos y jóvenes que desean defender sus hogares y familias! ¡Mantengan sus cabezas en altos, orgullosos de su raza!"

"Todos son importantes, todos son parte de la llama inmortal que es la humanidad"

"¡Levántense!", Hestia repitió con más fuerza, causando que el palpitar de los corazones y el calor que recorría sus cuerpos aumentara.