"¡Hui Mie!", la voz que apareció poseía una enorme majestuosidad, pero venía acompañada de una frialdad que congelaría los huesos de las personas y una intención asesina que ahogaría hasta al más malvado.
"Asura... ", líneas negras aparecieron en el rostro del Dios de la destrucción mientras se levantaba de su trono y veía como un hombre aparecía en la entrada del enorme salón. La oscuridad de la sala del trono del castillo de la destrucción era oscura, y solo algunas ventanas proveían luz. Pero, incluso así, la luz no ayudaba demasiado al ser de color purpura.
"¡¿Tienes idea de lo que pudiste haber causado, Hui Mie?!", Asura avanzo mientras liberaba toda su presión hacía delante. Un viento y aura color rojo sangre se manifestó como olas furiosas que cargaron hacía delante. Pero, al mismo tiempo, una presión cargada de destrucción choco en contra.
Las dos auras impactaron en el medio mientras luchaban. Mientras tanto, ojos color purpura y rojos se miraban con frialdad sin parpadear.
"¡Suficiente! ¡Podemos hablar las cosas!", en ese momento, la voz de la diosa de la vida resonó por todo el lugar, causando que dos pares de ojos la miraran antes de que los dos hombres resoplaran.
"Asura... ", ella continuó y miro al Dios Asura con una mirada un poco avergonzada. "Lo sentimos, pero quería ayudar al niño. No pensé que Hui Mie decidiera bendecirlo con un atributo como la ruina"
Asura se mantuvo en silencio por unos momentos antes de caminar un poco más hacía delante, mostrando su apariencia frente a la luz de una gran ventana. Él era un hombre alto, casi de dos metros. Su cuerpo estaba tapado por una armadura color rojo que parecía hecha de huesos. Pero, aún así, se podía notar lo robusto que era su cuerpo. Su cabello tan negro como la noche sin estrellas caía lentamente por su espalda y una corona de huesos se mantenía sobre su cabeza. Los dos ojos rojos en realidad parecían dos estrellas brillantes.
"¿Realmente crees que soy tan mezquino, Sheng Ming?", Asura resoplo molesto. Sus cejas en forma de espada se movieron con evidente disgusto.
"Esa mujer, Rakshasa, ya ha metido sus manos en mi anterior heredero. Si fuera una persona tan mezquina y asesina, entonces ya la habría matado hace tiempo. Yo, como muchos otros dioses, entiendo el aburrimiento de ser parte de nuestro reino de dios. Después de todo, solo podríamos ver las maravillas del universo cuando entregamos nuestras posiciones a herederos"
"¡Sin embargo!", Asura grito enfurecido, cambiando su expresión sería por completo: "¡¿Te das cuenta del peligro en el que podrías dejar a nuestro reino de dioses?!"
"¡Yo no acepte a Perseus simplemente por obtener un heredero! Si bien tener un heredero me daría la posibilidad de viajar por el universo en un futuro, también tengo que tener en cuenta la seguridad de este reino", inhalando con fuerza, Asura miro a Hui Mie con fuerza.
"¿O acaso se te olvida quien pidió que entrenara al chico?"
Hui Mie estaba apunto de gritar molesto, una de las cosas que más le disgustaba era que otros dioses le dijeran que hacer con una actitud de: se más que tu. Pero cuando Asura hizo esa pregunta final, el cuerpo del dios de la destrucción se congelo por unos momentos antes de irse relajando poco a poco.
Al final, un suspiro salió de su boca.
Sin que su esposa lo supiera, Hui Mie no quería simplemente ayudar a Percy por nada. Oh, no, esa no era su actitud. Y si bien ayudarlo a obtener poder podría resultar en un beneficio a largo plazo, no valdría tanto la pena.
El verdadero objetivo de Hui Mie era tentar a Percy con el poder del ojo de la ruina. Quería que él joven se moviera hacía el y, poco a poco, darle algunos otros beneficios mientras soltaba pruebas camufladas como desastres, bestias poderosas y otras cosas más. De esa forma, cuando viera que era suficiente, le entregaría directamente su posición como dios de la destrucción.
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Camino de Asura celestial [Terminada]
FanficTraicionado, herido y enojado, el cayó en las profundidades del peor infierno. Solo con su cuerpo y espada, se arrastro por la que debería ser su prisión. Con un odio y deseo de venganza por el causante de su desgracia, se arrastro hasta lograr su l...