Y es que tu me tienes loco tengo un lío en la cabeza
Imaginando que te toco quiero ser el que te besa
Es que tu me tienes loco se que sabes la respuesta°
—Wow. —fue lo primero que el Uchiha dijo una vez que se separaron del beso tan espontáneo e intenso. Una sonrisa se dibujó en su rostro— Debemos hacer esto más seguido.
Intentó acercarse a la chica para continuar con el beso, pero ella se apartó. El mareo que sentía se había desvanecido.
—No, yo... —ni siquiera podía formular una sola oración que no la hiciese parecer un pedazo de mierda— Sasuke, yo...
Él la interrumpió retrocediendo y pasando sus manos por su cabello: —Ya entendí. No tienes que esforzarte por no romperme el corazón.
El rubor no se hizo esperar en las mejillas de Haruno: —Ay, Sasuke. En verdad no quería usarte.
—Claro, no querías usar al casanova para olvidarte del cerebrito. Obvio.
El tono que el Uchiha utilizaba no permitía que identificara si estaba siendo sarcástico o si en verdad estaba molesto. Ella estaba consciente de que lo que había hecho estaba mal, extremadamente mal, pero el simple recuerdo de Itachi molesto porque le hablara a su hermano hizo que quisiera hacer todo lo contrario.
—Lo siento.
El azabache levantó sus hombros y los dejó caer con naturalidad: —Supongo que quieres que te diga que no importa para no hacerte sentir mal, asi que... —aclaró su garganta y mostró una hueca sonrisa— No importa, Sakurita.
—Ush, como quieras.
Lo rodeó y salió de la cocina donde una fría y violenta brisa le hizo cobrar consciencia de cuán acalorada estaba. ¿Qué le sucedía?
—¡Por fin te encuentro! ¿Dónde te habías metido? —la voz de Ino llegó por detrás y sus manos se posicionaron sobre sus hombros.
—Ah, tenía sed. Mucha sed.
—Ya veo, tienes corrido tu brillo labial. —comentó haciendo énfasis en el detalle.
—¿Por qué me buscabas? —regresó al tema antes de que comenzara a indagar.
—Cierto, Temari está organizando un juego de botella. —explicó— ¿Entras?
—¡Buaj! ¿Tener las babas de todos en mi boca? No, gracias. —sentenció— ¿Tú jugarás?
La Yamanaka negó sintiéndose orgullosa: —Las únicas babas que quiero son las de mi novio, muchas gracias.
—¿Entonces por qué me buscabas si no era para acompañarte?
—Porque Itachi jugará junto con su novia. —le dio un codazo y mostró media sonrisa.
—¿Y? ¿Les llevo flores?
Ino puso sus ojos en blanco: —No, solo creí que te interesaría tener la oportunidad de besar a Itachi sin ser vista como una roba novios.
No era tan mala idea, después de todo si Itachi estaba dentro significaba que a ambos les daba igual si su pareja besaba a otra persona, ¿qué mejor que besar a la mejor amiga con quien hay confianza? ¿Estaba mal que lo pensara de esa forma?