capítulo 14

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Fueron dos semanas interminables, dos semanas en las que no pude dormir...solo pensaba en ese estúpido mensaje, lo leía una y otra vez. Evidentemente eso no era de ayuda, pero díganme ¿Que harían ustedes en mi lugar ? Mi madre sigue preocupándose por mi...pero yo siempre le miento, con la peor mentira que pueda existir, esa mentira que todos decimos alguna vez en nuestras vidas y que la mayoría de las veces la gente nos cree "estoy bien"

Mi madre evidentemente no me creía, pero yo no le prestaba mucha atención, me concentraba en mis estudios...solo eso. Cómo ya lo había dicho esto era lo único que me ocupaba lo suficiente como para no pensar en ese mensaje.

"no quiero verte...déjame de hablar...bloqueame pero no hay que hablar más, no se cómo pude tener una cita con alguien tan repugnante me das asco, te veo y me dan ganas de vomitar"

Evidentemente aún no lo he superado, pero duele menos, he aprendido a controlar mis emociones, no las escondo solo las modero.

Estaba caminando hacia la heladería, teníamos una semana para reposarnos de la escuela...¿Es bueno? Si ¿Para mí? No mucho. Cuando entro a la heladería pido un helado de pistacho, de mis preferidos.  Cuando me dió mi helado le senté afuera y me senté en una mesa a tomar tranquila mi helado.

Cuando siento una sombra acercarse a mi. No quise mirar, pero no era de muy buena educación.

Después de tanto tiempo había aparecido, me saludó y le sonreí. Ella vino a mi, me abrazó y pude oler nuevamente el olor de su cabello, y ver aquellos ojos marrones que tanto adoraba.

- Lía ¿Cómo estás ?- pregunté a mi ex novia

- bien...vaya ya van tres años sin verte y te ves tan diferente- dice mirándome de arriba a abajo

- tu también...¿Cómo te ha llevado la vida ?- pregunto

- bueno...soltera ya sabes...es difícil encontrar a alguien cuando te adaptas a tanto - dijo y sabía que se refería a mi por su mirada coqueta

Les pongo en contexto, a mis 20 años estuve en una relación con Lia, de hecho fue ella mi primera pareja mujer, y es que no duramos mucho. A penas 5 meses que estuvimos juntas y es que yo la dejé. Para mí mi virginidad es algo muy preciado, no es algo que regale así por así, y cuando estaba con Lia no estaba preparada aún. Todos los días ella se quejaba de lo mismo, ella en ese momento ya no era virgen y quería más de mi, lo cual no estaba preparada yo para dar. Un día me cansé y la dejé, ella lloró y me replicó el porqué y yo le expliqué pero no entendía. Así que jamás nos volvimos a ver y jamás coincidimos ya que a últimas noticias ella se había ido del país.

- ¿Y que te trajo aquí ?- pregunté y ella me dió una sonrisa coqueta, puso un mechón de pelo bajo su oreja y lamió sus labios

- ¿Por qué crees?- preguntó y me encogí de hombros - se que está misión va a ser difícil pero lo voy a lograr - dijo segura de si misma

- Lia...¿Que quieres?- frunci el ceño

- te quiero a ti - respondió

- no...- no le dejó terminar cuando tomó mi mano con fuerza y acercó su cara a la mía tanto que pareciera que nos íbamos a besar...pero evidentemente no lo iba a hacer.

Sentí una mirada sería sobre nosotras y me viré haciendo que Lia hiciera lo mismo, y la Vi...ví a Lizzie, su mirada era triste pero tenía también decepción. Caí en cuenta que ella malinterpretó la situación y me paré queriéndome acercar a ella, pero ella se giró a caminar mientras Lia no paraba de preguntarme ¿A dónde vas? ¿Quien es ella ? ¿Me estás ignorando?

Llegamos tan lejos, caminábamos corríamos ella huyendo y yo tratando de alcanzarla, deberia darme a respetar ella me dejó bien claro que no me quería, pero es Elizabeth Olsen. y creo que cuando estás enamorada haga lo que haga siempre verás a esa persona perfecta, porque para ti, en tu mundo, en tu corazón esa persona es perfecta, es especial. Me cansé de caminar y opté por gritarle.

- Lizzie por favor...deja de correr y hablemos - grité ya que ella estaba casi en la otra esquina

- mejor vete con tu novia - ripostó

- Elizabeth ella no es mi novia y aunque ella hubiera querido yo no la hubiera besado...tú lo malinterpretaste - dije y ella paró, la pude alcanzar

- no mientas...eres como las demás, me buscabas y luego me cambias por ella - dijo al borde de las lágrimas

- a ver hay que dejar las cosas claras...TU me dejaste un mensaje diciendo que te daba asco y que no me querías ver...y justo eso hice, ella es solo una amiga lo malinterpretaste todo y para tu información...tu eres la única que nunca me amó y que me hirió y aún así estoy aquí persiguiendote...deja de pensar que todos están contra ti porque eres tú la que está contra el mundo...dijiste que te estaba cambiando por ella pero si de verdad me amarás, hubieras dejado a ese Robbie - dije enojada y tan rápido que ni me reconocí

- no...no puedo - dijo cabizbaja

- bien entonces...adiós - dije y me giré para irme pero ella me detuvo con su mano haciendo que la mirara

- ¿Porque te enamoraste de mi?- preguntó

- ¿Que ?-

- ¿Porque te enamoraste de mi ? Dime - preguntó nuevamente

- Elizabeth...yo...no me enamoré de ti porque como te ves si eso pensaste en un principio...o porque me haces sentir querida o porque importo en este mundo...esto no se trata de mi...yo me enamoré de ti por ese sentimiento de estar en casa, porque siempre me sentí sola pero cuando estoy contigo...por primera vez en mi vida no estoy atrapada en este sentimiento de lo desconocido - dije con toda la sinceridad del mundo

Ella me miraba triste pero comprensiva. Limpié alguna de las lágrimas que habían en mis mejillas y había tanto silencio que por primera vez sentí incomodidad estando al lado de Lizzie.

- por eso me enamoré de ti - rompí el hielo - ahora que lo sabes...ya me puedo ir, y si de verdad no quieres nada entonces no me busques...me estás dañando aún mas de esa manera - dije y salí de ahí

...

Llegué a mi casa y me acosté en la cama, pensando en lo que había dicho, me llamé estúpida muchas veces pero luego pensé que no fui estúpida, fui valiente, porque valiente no es el que se enfrenta al mundo sólido y sin penas...el valiente es el que se afronta al mundo sin miedo a las consecuencias...y siempre sea el, porque todos en el fondo somos sensibles, todos tenemos nuestro talón de Aquiles. Los problemas se enfrentan...eso dice mi mamá.

Digo esto...y me digo que sola nunca lograré reponerme de este problema.

Me puse mi pijama y tomé mi guión, hice un poco de meditación, me acosté en mi cama en una posición comoda y comencé con el proceso.

....

Un jarrón de vidrio resbaló de sus manos al verme, todos se levantaron y me miraron primero con algo de confusión y luego...todos estaban felices y yo también lo estaba...está también era mi familia.

- ¿Daphne?- dijo Wanda acercándose a mi , colocó sus manos en mis mejillas acariciandolas y yo tomé sus manos y las besé

- volví cariño - susurré y pude ver nuevamente su inmensa sonrisa.

Stories with Lizzie Olsen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora