FUE UN ERROR© |Completo✓|(Inspired by Gianluca L.)

"Fue un error"

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G I A N L U C A

Lo tengo decidido. 

Apareció en el aeropuerto con sus maletas al lado. Al vernos, subió sus lentes sol hasta dejarlo en su cabello e hizo notar su sorprendido rostro.

—¿Qué... qué hacen aquí? —dijo mientras se acercaba a nosotros.

—Vinimos para la última despedida —sonrió Andrés—. ¿No te alegra?

Trató de simular felicidad. Nos hallábamos: Larez, De la Peña, Callens, Cardona y yo.

Posiblemente, no se hubiese mostrado incómoda si yo no hubiese aparecido. No me dirigió la palabra, ella prestaba más atención a los demás. La conversación solo duró unos minutos, ya que se limitó a decir:

—Bueno, yo... yo no quiero perder el vuelo. Así que... Emm... los extrañaré —Abrazó a Larez. Y así fue uno por uno, hasta que llegó a mí.

La abracé, y ella a mí. Qué tan difícil era que nos quedáramos así. No quería separarla de mí, tampoco que ella lo haga.

—Emm... ya... ya me tengo que ir —mencionó, intentando librarse de mi abrazo, pero yo no la soltaba.

—No —contesté.

Cerré mis ojos y me aferré más a ella. Mi corazón latía y solo por ella.  Estábamos tan cerca y al mismo tiempo tan lejos.

—Oye... —me habló al oído—, los demás empiezan a mirar raro. Por favor, me tengo que ir.

—No —volví a responder.

—Hey, perderá el vuelo —trató de separarme Larez.

Abrí mis ojos, y sí, los chicos me observaban. Así que me aparté.

—Gracias —dijo después de despegarnos, y yo solo la miré—. Bueno, chicos... Ahora, sí me voy.

Dio un respiro fuerte, tomó sus 2 maletas y fue caminando hacia la sala de su vuelo. Veía cómo la distancia entre nosotros iba alargándose cada vez más; cuando ella ya se había alejado unos metros, Cardona comentó:

—Bueno, se acabó. Sé que tendrá un buen viaj... —lo interrumpí.

—Sí. Yo... ahora... regreso. Vayan avanzando al auto —finalicé, mientras seguía los pasos de Halie. No obtuve respuesta de ninguno de ellos y fue bueno que no preguntaran a dónde me dirigía.

No, no quería que se vaya. Y aunque esta situación fuese cliché, no importaba, dije que lo tenía decidido. Espero que así de cliché, también sea su respuesta... Eso espero.

—Me divorciaré —mencioné cuando ya me encontraba cerca atrás de ella.

Hace semanas me había olvidado de algo: que estaba casado. Que he demostrado mis sentimientos a alguien que, seguro tiene temor, tal vez sin darme cuenta el estar yo casado, era algo que más la alejaba.

Ella se detuvo y giró a verme.

—¿Qué?

—No estaré más comprometido.

Me miró paralizada por unos segundos; luego miró hacia mi atrás —supongo que a los chicos—, yo también giré, y claramente, los demás ya habían hecho lo que les dije, esperarme en el auto. Sin embargo, el único que se quedó parado ahí, fue Larez, que observaba la escena.

La chica observó su reloj de la muñeca e indicó:

—Gianluca —nos miramos. Luego volvió a desviar su visión hacia atrás mío y continuó—, otro lugar sería más cómodo.