Reinos [FIC BSD]

Cenizas

El reino del sueño se encontraba en ruinas, a donde sea que se observará todo era un completo caos, la capital que se caracterizaba por ser una ciudad de ensueño, hermosa y cálida había sufrido el mayor de los desastres, en cuestión de segundos terminó como un campo de batalla. El camino hacia el templo de la realeza aún se podía ver pequeñas flamas doradas consumiendo los restos de algo. entre los sobrevivientes al desastre se apoyaban para curar a los heridos y comenzaron la labor de rescate.

—¿Qué ha pasado aquí?—preguntó Chuuya, que observaba como todos corrían de un lado a otro, llevando cajas con alimentos, ropas y demás.

—Eso mismo me gustaría saber —respondió el castaño junto a él. Camino hasta un señor que iba con unos cántaros llenos de agua —Disculpe ¿qué ha ocurrido?

El hombre lo miró tristemente —Hace unos días ocurrió un accidente, un incendio dentro del templo real Todo es un caos, nuestro rey no despierta, fue gravemente herido —Con una mirada llena de angustia —Les recomiendo que vayan a otro reino, no estamos en buen tiempo para los turistas —Se marchó corriendo agitando el agua en los cántaros que llevaba.

—De todos modos no podemos quedarnos mucho tiempo aquí —hablo Dazai —Este lugar sirve como atajo para llegar al reino de las sombras.—observó alrededor y suspirando— Pero tampoco es como que pueda hacerse de la vista gorda ante esto. Tenemos buena relación con el reino de los sueños.

—¿Qué planeas?

—Lo ideal es irnos y continuar con nuestro camino...—estirándose y con un tanto de pereza —Un poco de ejercicio no caería mal. —sonriendo hacia Chuuya y guiñandole —Solo una muestra de lo que tu novio puede hacer. —camino tres pasos lejos de Chuuya, estiró sus brazos a sus costados, cerrando los ojos murmuró un pequeño hechizo, tras pronunciar levantó la mano derecha, sus dedos apuntaron directamente al cielo y la mano izquierda bajo, exactamente para apuntar hacia la tierra. La mano derecha comenzó a bajar lentamente y la izquierda subió, hasta que ambas palmas se encontraron.

Chuuya sin quitarle los ojos de encima a Dazai, no se percató que en el cielo se había formado una nube negra. Momentos después de que Dazai abriera los ojos, el sonido de un relámpago conmocionó a todos, seguido al ruido una lluvia comenzó. —¿Hiciste llover?—enarcando una ceja

—Un hechizo simple pero que requiere concentración —se acomodo el cabello humedecido hacia atrás —Un error y un diluvio apocalíptico podría suceder —observó a su alrededor—Creo que con esto bastará para sofocar las llamas.

—Creí que harías otra cosa

—¿Te parece poco crear una lluvia en todo el reino del sueño?—camino hasta Chuuya —Tus estándares son muy altos, pero no es nada que no pueda alcanzar

—Espera, ¿dijiste todo el reino?—pregunto conmocionado.

—¿Hay algún problema?

—No

—Tienes un novio genial, ¿no te parece?—sonrió

—Lo que tengo es un novio presumido, uno que quiso aprovechar este momento para alardear de su poder mágico —empezó a caminar alejándose de Dazai —Andando, arreglemos esto y busquemos a tus hermanos.

—Me retracto —Chuuya al escuchar esto giró su cabeza para ver a Dazai que anda pocos pasos detrás de él —Soy yo quien tiene un novio genial.

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—¿Es cierto lo que dice el informe?—hablo un hombre desde el trono—Tenias solo una misión y no pudiste completarla —Se levantó del trono y le dio una patada al hombre arrodillado frente a él —¿El cargo te queda grande, debería degradarte a un simple sirviente lava pisos?,¿Tan difícil era hacerse cargo de una princesa?

Akutagawa se enderezó —No se me escapara por segunda vez, tuvo ayuda de otros sobre todo ese hombre tigre me retraso.

—¡Emperador!, ¡Emperador!—Un guardia irrumpió la sala del trono real—Nos estan atacando.

—Sabía que no se estarían tranquilos, ¿que emblema llevan los soldados?—sonriendo con malicia—Para saber a qué reino enviar sus restos.

El soldado temblando de miedo —Mi emperador, no hay soldados no es ningún reino quien nos ataca, el reporte que llegó de la frontera es que solo es una joven.

—¿Qué?, deja de decir tonterías

Otro soldado ingresó a la sala —Emperador ya determinamos el origen del ataque en la frontera. —Dostoevsky hizo una señal con su mano para que continuara hablando —Es la princesa Yosano Akiko

El emperador miró a Akutagawa —Espero que cumplas con lo que has dicho y no me fallaras una segunda vez—dirigió su mirada a los guardias —Akutagawa irá al frente con ustedes, ante cualquier anomalía avísenme de inmediato.

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—¿Por qué estoy aquí? ¿Por qué mi cuerpo se mueve contra mi voluntad?...Por favor alguien ayudeme ¡Ayudenme!— gritaba la conciencia de Akiko mientras su cuerpo era controlado por el espíritu del dragón que lleno de odio y venganza contra los humanos quemaba todo a su paso.

—¡Callate y solo observa!—respondió una segunda voz, la del dragón.

En el reino de las sombras una joven, de aspecto inocente con movimientos ágiles y llenos de gracia como una bailarina de caos, el fuego su acompañante , las cenizas, ovación del público. La bailarina de una sonrisa de odio y ojos llenos de lágrimas, un llanto de una princesa atrapada en espera de que sus súplicas fueran escuchadas.

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Hola, aunque es corto el capitulo espero que les haya gustados. Ya nos estamos acercando al final ¿Qué creen que va a pasar?, se viene lo intenso, espero poder transmitir correctamente las emociones... A todos gracias por leer, seguirme y comentar, si los leo!! n.n