¤AFTER ALL¤

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-¿Y cómo les fue con la niña?- le preguntó Bocón a la pareja que entraba a un privado del Gran Salón, en el cual sólo se permitía el paso a la familia del jefe, su consejo y, algunas veces, el consejo de ancianos.

-Nos contestó algunas preguntas, pero no nos agradaron las respuestas que nos dió.- anunció Astrid al mismo tiempo que llegaba a la mesa central que había.

Hiccup se puso a su lado.

-¿Y eso por qué?- cuestionó Patán, quien estaba sentado sobre unos cofres de oro y reliquias de Berk, él mostraba una postura aburrida.

-Dijo que se adentró al bosque siguiente a su papá, quería ir con él, sabiendo que la tormenta estaba llegando.- informó el jefe con seriedad, los demás se impactaron ante la noticia- Tal vez no quería dejarlo solo en medio de la tormenta. Yo habría hecho lo mismo.- añadió apagando su voz recordando a su papá.

Pero de inmediato, sintió la mano de su novia enredarse en sus cabellos como consuelo.

-¿Pero su padre qué hacía en el bosque?- preguntó Valka con zozobra.

-Assa dijo que su padre estaba recibiendo cartas, pero no en el puerto, todos lo sabríamos.- habló antes pensando en la situación- Las recibía al límite del bosque. Sea quien sea con quién se hablaba ese hombre, no querían que no conocieran su identidad. Al menos, no aún.- dedujo con el ceño fruncido.

-Pero eso es extraño.- opinó Patapez, quien estaba al borde de la mesa, como Bocón, Eret, Valka y la pareja.

Patán seguía sentado en el mismo lugar y los gemelos estaban sentados en el suelo jugando a las palmadas, con la condición que el que perdía recibía un golpe por parte del otro.

-Ni siquiera las islas saben aún de nuestra nueva ubicación. Hay algo detrás de todo esto.- aseguró Eret.

-¡Apenas llevamos una semana sin dragones! ¡Una sola!- exclamó Hiccup sorprendiendo a todos, incluso a los gemelos- ¿Y ya tenemos otro problema? ¡Solo quiero paz para mi gente!- soltó frustrado.

-Tranquilo, hijo. No debe ser algo muy grande, nos encargaremos.- le habló su madre.

-Oigan...- Ingerman volvió a hablar, pero esta vez con temor- Pero para que alguien se haya acercado por el límite del bosque y no lo hayamos visto, han debido de usar un dragón.- les comentó tímido.

-¡Tú cómo sabes eso, mi regordete amigo!- lo acusó Brutacio levantándose y señalando con su dedo índice- El límite del bosque, es el límite de esta isla, pudo venir por atrás.- aclaró.

-Vaya, esta vez estoy de acuerdo con Tacio. Tiene un buen punto.- apoyó Hofferson impresionada por las palabras del rubio- ¿Crees que alguien haya descubierto el Mundo Oculto?- le preguntó ahora a su prometido.

Este negó.

-No podemos hacer conclusiones apresuradas.- dijo- Hay una enorme posibilidad que varios dragones aún sigan afuera sin saber dónde está su lugar de origen.- pensó.

-Debemos hablar con nuestros aliados. Para saber si aún ellos tienen dragones y mantenernos alerta por todo el archipiélago- aconsejó el mejor amigo del anterior jefe.

-Ya mismo me pongo a hacer los mapas con las nuevas rutas para nuestros mensajeros.- avisó Patapez con entusiasmo.

-Ay, Cara de Pez está ansioso por calcular la ubicación de Heather desde esta nueva isla. ¡Supérala!- lo fastidió Patán haciendo reír únicamente a los Thorton.

-Cállate, Patán.- le regañó Haddock con el ceño fruncido- Para terminar... ¿Alguno tiene idea de quién pueda ser la persona con la que se contactó el papá de Assa?- les preguntó a todos.