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[Atención:Este capítulo contiene escenas pasadas de tono, insinuaciones y sexo explícito, si no es de tu agrado por favor evita leer el capítulo completo, no me haré responsable de nada luego de esta advertencia, gracias

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[Atención:Este capítulo contiene escenas pasadas de tono, insinuaciones y sexo explícito, si no es de tu agrado por favor evita leer el capítulo completo, no me haré responsable de nada luego de esta advertencia, gracias.]                

TARA

Luego de llevarme a una especie de cuartel general, interrogarme y casi torturar me, me dejaron ir a casa o más bien a la academia y se me notificó que recibiría un castigo, ya era muy tarde, casi las 3 de la mañana, trate de no hacer ruido, los pasillos estaban desérticos y helados.

Al llegar a mi habitación abrí la puerta con sumo cuidado, no quería despertar a nadie, una vez dentro cerré la puerta con llave, todo estaba muy oscuro y no lograba encontrar el interruptor de luz. La luz de mi mesita de noche se encendió, Satoru estaba recostado sobre mi cama.

-¿Qué mierda haces aquí?

Él solo rio ante mi pregunta, como si se burlara de mí, camine hacia él y lo sujete con firmeza del cuello de su camisa.

-Tara, tranquila, te dije que hablaríamos hoy -coloco sus manos sobre las mías- ¿acaso ya no quieres saber que pasa aquí?

-No estoy de buen humor -lo solté y retrocedí- vete de una maldita vez

-¿No quieres saber que trama el clan Zennin sobre ti, que le paso a tu padre?

-Eso no es asunto mío, mi padre era un cerdo

-No conoces a Toji -se incorporó en la cama, recostándose por la pared- hay tanto que no sabes, de dire todo, si me hablas de Klass

Ese nombre me helaba la piel, odiaba a Klass, para mí, ella era la peor cosa que jamás me había pasado, sé que no era su culpa, pero tampoco la mía. Sentía un ardor en la garganta, mis brazos picaban y sentía calor.

-¿Cómo sabes de Klass? -pregunte casi de forma inmediata- ¿Megumi te dijo algo?

-No, nunca me hablo de ella, pero tenía pesadillas y murmuraba su nombre, supuse que tu sabrías algo.

Camine a pasos lentos hacia él, las cosas se estaban complicando bastante, subí a la cama y me senté en sus piernas, observaba mis movimientos a cada segundo, otra vez tendría que voltear la jugada a mi favor.

-Klass es...-me detuve brevemente, desabrochando algunos botones de mi camisa- algo privado, no te gustaría saber de eso.

-Puedes contarme -acerco sus manos para ayudarme- Soy bueno guardando secretos, soy el mejor

Pronto sentí su respiración en mi cuello, y su lengua recorrerme, era tan cálida y húmeda, relajante en cierto modo, esto me desagradaba, pero haría lo que sea por mantener el secreto de Klass, lo prometí.

Él me quito la prenda superior, comenzó a tocarme de la misma forma en la que lo había hecho en el auto, su erección podía sentirse con claridad, rozando mi muslo izquierdo. Presione levemente mis caderas haciendo que él succionara con más fuerza uno de mis pezones, no gemí, no solía hacerlo y parece que eso era lo que él hacía.

Cada vez apretaba más mis pechos, buscando alguna reacción mia, pero era inútil, sonreí con burla, aleje su rostro de mis pechos y lo bese, necesitaba mantenerlo distraído todo el tiempo que pudiera. Me recostó en la cama y se quitó la camisa, desabrocho su cinturón y luego volvió a acercarse a mí, besando y mordiendo mi cuello, simulando embestidas cada cierto tiempo, mordí su labio y lo empuje levemente, dejándolo sentado en la cama.

Su respiración agitada y sus ojos azules hipnotizantes eran fascinantes, acerque mis manos a su pantalon y lo abrí sacando su miembro, jugué con él entre mis manos unos minutos, escuchando sus gruñidos y gemidos roncos.

Metí la punta en mi boca jugando con mi lengua y luego lo saque, dejando caer algo de saliva sobre este, finalmente lo metí a mi boca por completo, chupándolo con fuerza, sentí como sujeto mi cabello tratando de controlarme, pero no se lo permití, lamí y succione tanto como quise, fascinada ante sus temblores.

-Tara, maldita, no evadas el tema

Succione una vez más, con algo de fuerza, sentí como un líquido lleno mi boca casi de inmediato, no lo trague por completo, derrame un poco en mis pechos desnudos y comencé a tocarme frente a él.

Aún no podía moverse, parecía estático viendo mis movimientos, deje a un lado mis shorts quitándomelos por completo, pase mis dedos sobre mi ropa interior, gimiendo levemente ante la sensación.

Reacciono y acerco su mano a la misma zona, pero no fue una caricia, movió mi ropa interior y metió dos dedos casi sin aviso, sujete su brazo con fuerza mientras el metía y sacaba sus dedos con rapidez, estaba extasiada, tocando mis pechos mientras él me masturbaba.

Se detuvo y me arrojo a la cama, abrió mis piernas y acerco su rostro a mi entrepierna, arranco mi ropa interior y sentí su lengua recorrer mis pliegues.

Subió mi pierna derecha sobre su hombro y abrió un poco más la otra, daba pequeñas embestidas con su lengua mientras que con sus dedos seguía masturbándome, en este punto, tenía las manos en la boca, exigiéndome a mi misma no hacer ningún ruido.

Ya estaba rodando los ojos, no aguantaría, estaba segura de lo mojada que estaba ahora, él se detuvo un breve momento, estaba a punto de quejarme cuando sentí su lengua presionar mi punto más sensible, eche la cabeza para atrás y suspire pesadamente, él no se alejaba de esa zona, la succionada, lamia y besaba, por mi parte estaba delirando, ya no sabía que hacer.

Se detuvo nuevamente y sentí algo más duro en esa zona, me miro de una forma extraña, no pude descifrar esa mirada, sabía que hablaría, y debía evitar eso a toda costa.

Lo empuje por los hombros y me senté sobre él, metiendo su miembro en mí, yo no era virgen, ya estaba acostumbrada a esto, empece con movimientos leves mientras él sujetaba mis caderas, acelere un poco más dando centones firmes mientras las manos de Satoru iban a mi punto sensible nuevamente, dándome aún más placer que antes. No sé cuanto tiempo estuvimos así, pero sí que fue el mejor orgasmo de mi vida.

Apenas terminamos me separé de él, recostándome en la cama, segundos después sentí como se recostó junto a mí, sin tocarme o decir nada, estuvimos así al menos 15 minutos, hasta que hablo.

-Tara, sé que no quieres hablar y aún que el sexo fue maravilloso, es necesario

Voltee para encararlo, si debía hablar, al menos lo haría a mi modo, solo le diría lo que yo quisiera, después de todo yo sigo teniendo el control.

-Klass, es una larga historia

El tomo una manta que estaba en la silla junto a mi cama y nos cubrió, que asco, ¿Ahora fingiría interesarse en mi?

-Te escucho...

-Klass era una niña que vivió en la casa de alado cuando nuestro padre aún vivía, era hija única de una madre soltera, solíamos jugar juntos todo el tiempo, pero un día las cosas cambiaron, Megumi llego a casa gritando, había sangre en sus manos, papá fue a ayudarlo, Klass había caído desde muy alto y se rompió la cabeza, Megumi trato de ayudarla, pero era tarde, esa es la historia de Klass.

Gojo Klass, me sorprendía que Satoru no supiera de ella, siendo que ella era una miembro significativa de su clan, de seguro aquellos registros estaban prohibidos incluso para el, no me sorprende que no le dieran ningún beneficio respecto a ello.

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