Vidrio de Mariposa | Traducción

Capitulo 15

En el capítulo anterior:
Vimos la perspectiva de Albus, quien habla con Lily y Delphini, además de comentar que no le gusta su nombre prefiriendo Dorian
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Harry se despertó con el sonido del canto de los pájaros y se volvió de costado, gimiendo silenciosamente. Le dolía la espalda. El colchón estaba terriblemente lleno de bultos además de ser viejo, ya estaba lejos de ser cómodo. La única razón por la que se había quedado dormido en primer lugar era por lo emocionalmente agotador que había sido el último día.
Harry se dio cuenta de que solo había pasado un día. Parecieron semanas.

Harry sacó su varita, llamó a sus lentes y se los puso, suspirando de alivio cuando su visión se aclaró.
Realmente necesitaba arreglar su vista o acostumbrarse a no poder ver nada. Era demasiado arriesgado confiar en las gafas. Si alguien se los lleva o se rompen, se acaba el juego. Honestamente, era una maravilla que no hubiera sucedido durante la batalla final, o cuando él había estado huyendo.

A Harry se le revolvió el estómago. No pensaba a menudo en la guerra. Nunca pudo escapar del asombro que lo rodeaba constantemente (o del miedo), pero nunca pensó en ello. Era demasiado doloroso y una parte tan horrible de su vida. Siempre lo había dejado a un lado, enfocándose en la nueva vida brillante que tenía. Pero ahora, fue arrancado de debajo de él.

Harry se quitó las mantas y se puso de pie, estirando las torceduras de su cuerpo. Ayudó, aunque todavía tenía un dolor moderado. Cogió la bolsa de piel de topo y la hojeó. Quizás tendría algo dentro. Había tres pociones. Harry no estaba muy seguro de lo que hacían y prefería no usarlos. Había pequeñas etiquetas en ellos, con letras gastadas y apretadas. De Snape, se dio cuenta Harry. Habían pasado años desde que murió. Se tragó la bilis y volvió a colocar las pociones. Es mejor guardarlos para emergencias.

El pensamiento hizo que Harry frunciera el ceño. Realmente estaba de nuevo en la zona de guerra, ¿no? Incluso con Voldemort fuera, no podía estar a salvo. Para ser honesto, había estado más seguro con él cerca.

Harry transfiguró su ropa de dormir a su estado original: una bata suelta, jeans remangados y una camisa. Se sintió 16 de nuevo. Un momento después, parpadeó y retrocedió en sus pensamientos. ¿Realmente había insinuado que era mejor cuando Voldemort estaba cerca? ¿En serio?
Si. Sí, se lo hizo. <<Mierda>>

Era cierto hasta cierto punto. Voldemort no había sido predecible, en realidad, pero ... Harry lo conocía. Y fue una ventaja que compartieran esa conexión. Harry siempre había estado dos pasos por delante. Por eso había ganado. Por primera vez, la idea lo entristeció.

— ¡Papá! — Dijo Lily, mientras se levantaba de la cama. Ella todavía estaba usando su ropa de ayer, al igual que Albus, y Harry de repente se sintió como un padre terrible — Estás despierto—

Harry sonrió —Sí, estoy despierto—

— ¿Qué hay para desayunar? — Preguntó Lily, mirando a su alrededor con curiosidad, antes de mirar hacia la litera de arriba y trepar por la escalera. Harry no había pensado en eso y no tenía idea de qué decir. ¿Qué comerían de todos modos? ¿Qué podrían comer? Se negó a vivir de nueces y bayas de nuevo, como lo había hecho durante la caza de horrocrux. Entonces solo había tres de ellos, todos de 17 años. Pero ahora había dos niños y dos adultos. Esto iba a ser una pesadilla.

Albus lo miró fijamente —Has pensado en algo, ¿no es así, papá?—  El silencio de Harry habló por él.

Delphini bajó la escalera detrás de Lily. También estaba usando su ropa del día anterior, y su cabello era un desastre total, con mechones saliendo de su trenza.