Shaman King (Manga)

Parte 17 - El orgullo del Norte

Ya era de noche cuando Manta despertó en el estadio, descubriendo que Fausto cuidaba de él. Al recordar lo que había pasado, y tras Fausto comentarle que la última pelea del día era la de Icemen VS Funbari Onsen, Manta se preocupó mucho por sus amigos, pues no sabía que la Shaman Fight iba a ser tan brutal y sangrienta; no obstante, Fausto trató de tranquilizarle, diciéndole que no perderían.

Mientras tanto, en el restaurante Apache, Anna estaba molesta porque Yoh estaba demasiado relajado y porque Ryu estaba muy nervioso y no paraba de molestar a las demás personas.

– ¿Estás mejor Hikari? – Preguntó Yoh a su amiga que se encontraba a su lado.

– Sí... ya estoy más tranquila, gracias – Mostró una leve sonrisa – Perdonad por haberos preocupado...

– Está bien, no pasa nada. Tú eres la que peor estaba manteniendo eso en secreto para no preocuparnos. No te preocupes, todo saldrá bien – Dijo finalmente con una sonrisa.

– Yoh... – Le miró un poco sorprendida, pero sonrió. – ¡Sí!

Anna los miró molesta dándole una patada a Yoh por debajo de la mesa provocando que gritase de dolor. Entonces, el equipo de Ren llegó junto con Mei para cenar también, además de ver que Yoh no parecía preparado para el combate. Sin embargo, Yoh dijo que, aunque se enfrentase a ellos solo, ganaría con su primer golpe, lo que sorprendió a todos menos a Anna y atrajo la mirada de todos los que se encontraban allí.

– ¿Qué demonios... quieres decir? – Preguntó un sorprendido Ren.

– Yoh, ¿no crees que esa es una declaración demasiado fuerte? – La Ainu se veía preocupada, mirando de reojo a la gente que los miraba.

Yoh entonces explicó que, hace dos meses, se encontraron con los Grandes Espíritus y Anna les mostró la Tchou-Senjiryaketsu, tras lo que se habían vuelto muy fuertes con dicho entrenamiento; Yoh llamó a Ryu y ambos se reunieron con Fausto, listos para ir al estadio. No obstante, había un equipo que no estaba muy contento con lo que Yoh había dicho, por lo que su líder decidió que le darían una lección; sin embargo, Horo Horo les detuvo. El Ainu advirtió a dicho equipo, quienes eran el equipo Icemen, de que no subestimasen a Yoh; sin embargo, éstos simplemente decidieron mostrar su poder: Zoria atrapó a Chocolove en un bloque de agua y después Pino lo congeló. Cuando Cardimahide se dispuso a destruir el bloque de hielo con Chocolove dentro, Horo Horo y Mei trataron de lanzarse a protegerle, pero una persona había sido más rápida y había parado el hacha con sus propias manos.

– ¡¿H-Hikari?! - Gritaron los chicos.

– Vaya, vaya. ¿No eres la chica que hizo aquel concierto hace varios días? – Preguntó Pino manteniendo su actitud.

– Os pido por favor que paréis esta absurda provocación y dejéis a mis amigos en paz – Hikari estaba sonriendo; parecía que estaba calmada, pero era evidente por sus palabras que estaba un poco molesta.

– Hikari tiene razón, ¿podéis dejarles en paz? – Mei por su parte estaba más preocupada y trataba de razonar.

– ¿Y qué crees que una panda de mocosos débiles como vosotros puede hacer? – Comentó Pino.

– O-Oye Pino... – Le llamó su compañero.

– ¿Hm? ¿Qué ocurre?

– E-Es extraño... No puedo moverme...

El gran hombre trataba de liberar su hacha de las manos de Hikari sin éxito; no se movía nada y no parecía que ella estuviera haciendo fuerza.

– ¿Cómo que no puedes moverla? Déjate de bromas – Dijo Pino sin creérselo.