Shaman King (Manga)

Parte 25 - The Ren Vs Myooh

Por la mañana en la posada, el grupo al completo se encontraba desayunando junto a Luchist, Opacho, Lyserg, Marco y Jeanne, además del equipo X-II... a lo que Anna quería una explicación. Luchist trató de calmarla enseguida, asegurando que debían celebrar que Yoh estaba dentro de la pelea de nuevo y que, fuera de los combates, podrían disfrutar de la compañía de los demás. Marco desconfiaba aún y aseguraba que tramaba algo, cosa que casi termina en pelea, pero Lyserg razonó con él y le dio un chocolate belga para calmarle.

Marco pidió Denbat un café, pero éste se negó, pues el trío seguía molesto porque les había engañado todo este tiempo; sin embargo, Jeanne sirvió al Soldado X su café, asumiendo la responsabilidad de todo lo ocurrido y alegando que debían convertirse en los Neo-Soldados X, cosa a la que los cuatro accedieron. Ren estaba molesto sin embargo, pues aún no dejaban que Yoh dijese lo que tenía que decir, pero nadie parecía calmarse... cosa que aumentaba el cabreo de Anna.

– Uhm... ¿chicos?

Mei trató de llamar la atención de alguno de ellos para que parasen, pero nadie la escuchó. Al ver cómo el cabreo de la Itako crecía, la Ainu simplemente cargó a Opacho y se apartó de la mesa, tras lo que Anna la destrozó para que todos se callasen. Yoh entonces abrió la conversación y anunció que el ganador del torneo sería Hao, además de que no tendrían oportunidad si luchaban siguiendo las reglas.

– ¡Eso es imposible! – Gritó Ren.

– No lo es, ¡ya le has visto! – Razonó Mei con él – Tú mismo sentiste su Furyoku en varias ocasiones... Yoh tiene razón, no hay manera de ganar así.

– Entonces, ¡¿qué sugieres que hagamos, Yoh?! ¡¿Por qué seguimos peleando?! ¡No me digas que vas a retirarte de nuevo!

– ¡Ren, basta!

Yoh entonces explicó que para asimilar a los Grandes Espíritus, el Shaman ganador deberá caer en un sueño eterno tras el rito del bautismo, momento en el que atacarían. Sin embargo, Luchist también explicó que deberían derrotar a los Apaches que protegen al Rey, además de que Hao tenía a sus seguidores. Lyserg no entendía por qué se seguía celebrando la Shaman Fight si siempre ha sido así, a lo que Anna añadió que tan sólo los 12 Shamanes de los 4 equipos que alcancen las semifinales los que pueden llegar al lugar de la ceremonia. No sólo eso, los equipos Nyorai y Ten de los Gandara habían pasado a la siguiente ronda de combates... y el equipo Myooh se enfrentaría al equipo de Ren.

– Ah, se me olvidó decir también una cosa – Comentó Luchist. – Aunque llegasen a derrotarnos, a los aliados del señor Hao y a los Apaches, aún os quedaría un último obstáculo que dudo que podáis derrotar.

– Un último obstáculo... – Murmuró Mei, pensando qué podría ser.

– Seguramente lo dice para asustar a los inútiles – Comentó Ren.

– ¡¿A quién llamas inútil?! – Exclamó Horo Horo molesto.

Luchist se rió ante la escena.

– ¿Y si os dijera... que ese último obstáculo... es vuestra amiga? La que falta aquí y se encuentra con el señor Hao – Dijo sin borrar la sonrisa de su rostro.

Todos se quedaron mudos ante esa declaración, algunos permanecían serios y otros estaban visiblemente preocupados.

– ¡¿Qué?! – Exclamó Manta sin querer creerlo.

– Pero... la única que no está aquí es... – Murmuró Pilika.

– ¡La señorita Hikari...! – Completó Tamao.

Eso último molestó mucho a Mei, quien golpeó la mesa con ambas manos y se levantó.

– ¡¿Qué insinúas, Luchist?! ¡Hikari no es el tipo de persona que traiciona a sus amigos, ella es muy inocente! ¡¿Acaso pretendes que nos peleemos entre nosotros?!