Todo el lugar cambió y regresaron a la habitación.
– Y diría que eso es todo... Y ahora... Desde hacía un rato que quería decirte algo, Lyserg Diethel – Le miró seriamente – ¿Por qué no les contaste sobre tus sospechas con mi relación con Hao?
– ¿A qué te refieres? – Preguntó Lyserg con una sonrisa.
– ¿Crees que no lo sé? – Saca aquel trozo de tela que vieron en una de las imágenes del pasado, el mismo que Hao le había dejado a ella junto a la nota antes de irse – Esto lo llevaba como accesorio en el concierto, reconociste que era un trozo de la capa de Hao. Comenzaste a sospechar de mí y se lo contaste a Marco. Tú fuiste el que incitó a Marco provocando que él me matase.
– ¡¿Qué?!
Todo el mundo se giró para ver a Lyserg en shock.
– Es cierto que le conté a Marco mis sospechas... pero no pensé que llegara a esos extremos... y aunque lo supiera, no puedo controlar a Marco – Explicó el inglés.
– ¿De verdad lo dices? Tú que sin dudar dejarías morir a cualquiera que esté aliado con Hao. Por ejemplo, te alegraste de la muerte de Boris y luego está Bill. Te quejaste porque Yoh lo salvó de los Soldados X cuando quedó gravemente herido por ellos. Y te recuerdo que puedo leer las mentes, es normal que sepa ciertas cosas que ocurrieron.
– Lyserg... ¿es eso cierto? – Preguntó Ryu sin querer creerlo.
– ¡¿Es que eres idiota?! – Gritó Horo Horo agarrándole del cuello de la camisa – ¡¿Cómo se te ocurre hacer algo así?! ¡Hikari nunca...!
El Ainu entonces fue interrumpido por unos relámpagos que impactaron alrededor de ambos.
– ¡Oye Ren, ten más cuidado! ¡Casi me das!
– No he sido yo, Horo Horo... – Murmuró Ren, mirando de reojo a Mei.
– Desgraciado...
La cara le había cambiado por completo; la expresión serena que hasta ahora había tenido la rubia, se había transformado en una mirada que le heló la sangre a cualquiera que la mirase a los ojos. Su colgante brillaba con intensidad y algo parecido a agujas doradas de doble filo la rodeaban y se cargaban de electricidad mientras se acercaba a ambos.
– Apártate, Horokeu...
Sin rechistar, y con bastante miedo, Horo Horo soltó a Lyserg y se apartó.
– ¿Qué crees que has hecho...? – Comenzó, su tono era frío y amenazante – ¿No pensaste que llegara a esos extremos...? ¿No puedes controlar a Marco...? Todo eso no es más que un montón de mierda... desde el momento que abriste tu asquerosa boca, condenaste a muerte a mi mejor amiga.
– O-oye Mei, ¡no le hagas daño a Lyserg! – Rogó Ryu.
– No sirve de nada ponerse así ahora mismo, cálmate por favor – Trató de razonar Yoh.
– ¡¡NO OS METÁIS!! – Gritó con furia mientras algunas de estas descargas iban hacia Yoh y Ryu, quienes no fueron alcanzados por los pelos.
– O-oye, pensé que nos entendíamos – Murmuró Lyserg, sudando ligeramente debido a la tensión.
– Eso pensé también... Visto lo que me habían contado de tí, pensé que habías recapacitado... ¿pero matar a mi amiga...? – Las agujas entonces se reunieron en círculo y, en el espacio central, la electricidad se cargaba y concentraba para disparar – Eso no tiene perdón.
– Mei, ya basta por favor – Dijo Hikari aún sin cambiar la expresión seria, sin apartar la mirada del joven.
– ¿Por qué debería...? – Dijo, mirándola de reojo – ¿Tú acaso le perdonarías si yo hubiera estado en tu lugar...?
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Shaman King (Manga)
Romance¿Te gustó la historia que escribimos basada en el anime? MidnaChalenging y yo hemos escrito la historia de nuestras personajes basándonos en la LA HISTORIA DEL MANGA, así que debes de haber leído el manga antes de leerlo. Habrán cosas iguales o par...