Capítulo 2

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Narra Saint:

Desde niño, soy un actor, he participado en comerciales, series, películas, conciertos, presentaciones de programas en vivo y mil cosas más. Mi vida sería realmente agotadora si no fuera por mis fans, son los únicos que siempre están ahí para apoyarme, aparte de mis amigos.

He pasado momentos muy duros en mi carrera, a veces inclusive llego a arrepentirme de escoger esta profesión. Pero, mi padre murió cuando aún era un niño y trabajar en esto ponía la comida sobre la mesa, además, mi madre jamás me explotó, por el contrario, me ayudó a estudiar.

Pese a que mis estudios fueron a distancia, mi mamá siempre me motivó, hasta el día que ella decidió casarse de nuevo. Su esposo tenía una niña, su nombre es Sammy, ella se enamoró de mi mánager Max y por orden de mi padrastro, ellos se casaron; pero su matrimonio no fue lo que esperaban.

- Max, lo intentaron y no funcionó; divórciense.

- ¡Qué más quisiera Saint! Pero... Tu padrastro me hizo firmar un contrato prenupcial.

- ¡Muéstrame! ¿Puedo verlo?

Mi padrastro es un hombre muy inteligente, debo reconocerlo, el contrato especifica que la palabra divorcio no puede existir entre ellos. Además, estipula que solo la muerte de uno de ellos podría llegar a separarlos, incluso que si llegasen a divorciarse, Max quedaría literalmente en la calle.

- Como ves, tu padrastro me tiene acorralado.

- Te dije que no debiste casarte.

- ¿Qué podía hacer? ¡Mi vida estaba en sus manos! Si no me casaba con su hija, arruinaría mi reputación y ni tú podrías salvarme de eso.

- Lo lamento mucho, sabes que yo no soy así.

- Lo sé y tú también sabes que aunque considero que Sammy es una mujer hermosa, yo no puedo amarla, ni siquiera hemos consumado el matrimonio.

No sabía la situación bajo la cual se había casado Max con mi media hermana y honestamente, me hace dudar sobre la boda de mi madre. Algunos días después hablé con mi madre y le conté todo esto; pero ella me dijo desconocer esa actitud, incluso provoqué una pelea que acabó en divorcio.

- Mamá, perdóname, tal vez debí callar.

- Hijo mírame... Nadie debe ser obligado a casarse, eso debe ser por amor, así que no te culpes porque hiciste lo correcto.

- ¿Hay alguna forma de ayudar a Max?

- No, la única manera es que ella pida el divorcio.

- Sammy está enamorada de Max, aunque sea infeliz igual seguirá con él.

Max es mi mejor amigo, prácticamente como mi padre, él es quien siempre estuvo ahí cuando lo necesitaba. Me animaba para calmar mis nervios, me abrazaba cuando me sentía triste y fue el primero en preocuparse al saber que alguien invadió mi habitación.

- ¡Vete a mi habitación Saint! ¡Ahora!

Habíamos llegado pasada de las 10 de la noche por una escena que se alargó un poco; me sentía agotado, pero quería una explicación. Casi dos horas más tarde, Max llegó a su habitación donde yo estaba y aunque quiso evitarme, le dije que no lo dejaría dormir hasta que me dijera la verdad.

- Saint hablemos mañana.

- No, Max todas las noches me dices lo mismo.

- Bien... Desde hace una semana, se están metiendo en tu habitación.

- ¿Una semana? ¿No se supone que tengo seguridad?

- No sabemos cómo está entrando; pero hoy... Saint, esta persona se masturbó sobre tu cama.

El Jefe Perfecto "ZeeSaint"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora