Capítulo 5

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Narra Zee:

No supe que hacer cuando Saint lloró, así que solo lo abracé; minutos después me llama el doctor de Nat y dice que urge que vaya a verlo. Después me llama Talay diciendo que ya había llegado al hospital, que solo le dijera donde estábamos para quedarse a proteger a Saint.

- Saint, te presento a Talay, él te protegerá con su vida.

- Mucho gusto Saint.

- ¿Adónde vas Zee? ¿Me dejarás solo? - Agarré su rostro y junté nuestras frentes.

- Jamás te dejaré solo; pero debo hacer algo más.

Sin decir nada más, ni permitirme besarlo, tampoco podía dejar que me detuviera, así que salí corriendo a la habitación de mi hermano. Ohm había ordenado que lo enviaran a este hospital privado, porque pagó la operación aquí donde todo es más costoso.

Me preocupa Saint, su hermana acaba de fallecer, él se siente culpable porque la llamó a la mansión para contarle no sé qué. Pero, mi hermano es lo único que me queda en esta vida, por eso decidí irme a buscarlo para poder verlo, espero que no sea nada grave.

- ¡Nat! ¿Estás bien?

- Zee... No lo sé... Hace mucho frío.

Nat estaba muy helado, todo su cuerpo estaba pálido, casi de color amarillo, no puede ser que no vamos a lograrlo. Desearía ser yo el enfermo, así que le dije al doctor que tomara mi corazón para mi hermano, porque yo no podría vivir con la culpa si él muere.

- Señor Zee, en realidad lo llamé para que firme esta autorización.

- ¿Y eso para qué es?

- Tenemos un donante compatible; urge que firme para llevarlo a cirugía.

Ni siquiera quise leer lo que decía la autorización, solo se las firmé para que se lo llevaran rápido a sala de cirugía. Cuando lo tuvieron listo, agarré su mano y lo perseguí con la camilla para que sepa que yo estoy con él y que lo estaré esperando aquí mismo.

- ¡Sé fuerte Nat! ¡Tienes que volver conmigo hermano!

- Gracias Zee.

Entonces sentí como nuestras manos se separaban y vi como se alejaba de mí, lo que me hizo sentir solo y triste. Esperé mucho tiempo a que mi hermano saliera de cirugía, ni siquiera pude dormir pensando en que su cuerpo estaba muy débil y temo que no resista la operación.

Sin embargo, solo tuve que esperar cuatro horas a que saliera el doctor de la cirugía, al verme puso su mano en mi hombro, lo que me hizo creer que Nat no había resistido la operación; así que sin que dijera nada, empecé a llorar, pero él me pidió que me calmara.

- La cirugía fue todo un éxito; su hermano estará bien.

- ¡Muchas gracias Doctor!

Lloré de felicidad por primera vez en años, me sentí tranquilo y en mi corazón le agradecí a mi madre porque sé que ella fue su fortaleza. Tuve que esperar el resto de la noche para que Nat saliera de observación y luego lo llevaron de nuevo a su habitación, donde yo lo esperaba.

Me preocupé por Saint en un par de ocasiones, espero que esté bien, que Talay lo esté protegiendo de verdad. Pero, aunque quisiera salir corriendo para abrazarlo, mi hermano me necesita, por eso me quedé a su lado esperando a que despertara.

- ¡Zee! - Me despertó que él me llamara.

- ¡Nat! ¿Cómo te sientes? - Me acerqué a su cama.

El Jefe Perfecto "ZeeSaint"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora