Beautiful Ángel |8| B.F

Capítulo 3: Conversación extraña.

Nota: Cuando hayan "**" significa que es un sueño. Y cuando hayan "<>" significa que es un pensamiento.

MARATÓN 1/?

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Camila llevaba dos días sin poder conciliar el sueño, pues siempre se le venía la imagen de Harley gritando y pidiendo ayuda, cada vez que cerraba los ojos. Tampoco iba al instituto, pues la consejera estudiantil le recomendó a los padres de la rubia que no fuera por el momento, aunque esto era muchísimo peor. Nunca fue de tener muchos amigos, pero estar sola, en un cuarto, con una mente llena de voces, no era muy bueno para ella.

Era de noche, otra vez, sin poder pagar un ojo. Camila estaba recostada en su cama, mirando en la oscuridad de su cuarto a su techo. No podía dormir, y eso la frustrada cada vez más. También sentía un vacío en su pecho y, aunque ella lo conectará con su amiga, ella sabía que no era solamente la desaparición de su amiga lo que lo provocaba.

Oyó voces en el piso de abajo, y sintió curiosidad, y que sus padres estaban en sus respectivos trabajos, lo cual, aún no era hora de su regreso a la casa. Frunció el ceño y se levantó de la cama, la curiosidad en ella era peor que cualquier cosa que hayan conocido antes. Caminó hasta la puerta, abriéndola casi sin hacer ruido, y luego se acercó a las escaleras, donde se quedó parada al oír claramente la voz de su hermano y su novia, los que estaban en la cocina.

-Amor, sabes que no es posible tenerlos alejados tanto tiempo.- Dijo Leah, con tono obvio.

-Si puedo mantenerla lejos de esto, mejor.- Dijo Bautista, con su voz cansada.

-No podrás hacerlo por siempre, sabes que al final, estarán juntos. -Dijo Leah, con razonamiento.

-Leah, tú mejor que nadie sabes lo importante que es ella para mí. -Oyó decir a Bautista.

< ¿De quién hablan?. >, se preguntó Camila, pegando su oreja a la pared.

-Lo sé, Bau. Créeme que lo sé. -La voz de la mujer sonó cansada.- Pero les dolerá cuanto más alejados estén. Tampoco me agrada la idea de que ella sea una más, porque sé el peligro que conlleva serlo, pero no se elige y mucho menos se puede evitar.