Más allá de la luna |cosmos II [BORRADOR]

10- 'Mírenlo ahí... tratando de ser gracioso' [PARTE 1]

Digan presente si esperaron éste capítulo con ansias. :D

Camino hacia las agradas y subo hasta la cima para situarme a lado de donde se encuentra Emmett. Está fumándose un cigarrillo muy tranquilamente como si esto no fuera a traerle consecuencias con la rectora.

—¿Por qué fumas? —le pregunto alisando mi falda para sentarme. Apoyo mis codos en mis piernas para situar mi mandíbula en las palmas de mis mano y girarme a verlo—. Si alguien te ve, te meterás en problemas.

—Ya me ves tú y con eso no me meteré en problemas, ¿cierto? —ironiza con una sonrisa de burla.

—Bobo—le doy un golpecito en el hombro y sonríe.

—Quiero invitarte a cenar—dice terminándose el cigarrillo y dejándolo en la grada para pisarlo—. Este sábado por la noche.

Cojo mi botella de agua de mi mochila.

—¿Y desde cuándo necesitas una invitación para aparecerte en mi casa y querer cenar conmigo? Ya hasta parece que vives ahí.

—¿Y te molesta que lo haga? —cuestiona en drama, como si estuviera ofendido.

El tono en el que lo dice impide que me lleve la botella a la boca. En su lugar, suelto una risilla.

—He... nop.

Me sorprende y me da miedo, la honestidad con lo que lo digo.

—Ah bueno—responde un poco más complacido—. Pero la cena no será en tu casa, sino en la mía.

Su comentario hace que casi me ahogue con mi trago de agua. Siento como esta se me viene por la nariz haciendo que me arda y termino sacando el agua por la boca.

Él me jala de las orejas.

—¡Hey! —protesto.

Levanta las manos en señal de rendición.

—Sólo quería ayudar. Dicen que eso ayuda. —se defiende.

Entrecierro los ojos en su dirección y me limpio el agua con mi antebrazo volviendo a tapar la botella y meterla en mi mochila.

—¿Cómo está eso de que la cena será en tu casa? —vuelvo al tema.

Suelta un suspiro y se sujeta de las manos, apoyando sus antebrazos en sus piernas.

—Mi madre. —responde con simpleza.

—¿Ella quiere que vaya? —pregunto notablemente asombrada.

Asiente—: quiere conocer la razón por la que llego tarde todas las noches a casa.

Mis mejillas se calientan y los nervios me invaden.

—Eso no es mi culpa—me defiendo.

—No. Es mía, yo soy el que quiere pasar tiempo con mi amada novia—ironiza mi mención—. Pero para ella es la misma, así que, mañana pasaré por ti a eso de las 7 para que puedas conocer a mi familia. Ahora debo de ir a clases, Ginger.

—Pero que afán el tuyo de irte así nomás.

—No te quejes, eres muy bonita como para pasarte todo el tiempo molesta.

Antes de que pueda decir algo más, me toma por el rostro y une nuestros labios. Me sorprendo por ello que ni siquiera reacciono cuando se pone de pie, baja las gradas y se aleja por el campo de futbol yendo a las instalaciones.

💋

—¡Allie, baja a comer!

Al oír a mi madre—muy lejanamente— me quito los audífonos y los dejo junto con mi móvil sobre la cama. De un brinco me pongo de pie, salgo de la habitación y camino hacia el comedor donde me encuentro a todos reunidos ya para comer.