psicólogo -hyunlix

29

—Hola, Felix.

Felix se sobresaltó cuando escuchó aquella voz, y aunque le generaba curiosidad, dudó en si debería darse la vuelta o no.

Así que optó por hacerlo, dándose la vuelta sigilosamente. Como si cuidara sus movimientos.

Y ahí lo vio parado a Han Jisung. El chico que hace años atrás estaba perdidamente enamorado de Changbin y que al final sólo había resultado en un sueño perdido.

Claro que recordaba todo perfectamente como si hubiera sido el día anterior, a pesar de que se quiso convencer de que olvidaría todo su pasado, había cosas que evidentemente no iban a poder ser borradas.

Se quedó callado por unos segundos, Jisung lo miraba sonriente y esperaba por la respuesta del peliazul, sin embargo él seguía en shock.

Lee seguía mirándolo casi sin poder creerlo, porque hubo y notó un gran cambio en él. Su pelo partía de un wolfcut castaño, ya no era más pelirrojo tirando a naranja. Sus mejillas seguían ahí, pudo ver un sutil maquillaje elegante en los costados de sus ojos y un sutil delineado por igual.

Vestía un traje azul marino, camisa blanca y sin corbata. Se veía mucho más elegante, superado.

—Hey, hola.

—Qué sorpresa encontrarte por acá— dijo el castaño, y continuó sonriendo con esa aura brillante que años atrás la había visto destruida—. ¿Cómo estás? ¿Vienes acompañado?

Felix formó sus labios en una línea y guardó las manos en sus bolsillos.

—Vengo acompañado con mi tía y su otra sobrina— miró por la vidriera, observando a las dos damas esperando por él sentadas en un banquillo blanco.

Jisung las miró y las saludó a través del cristal, y aunque las mujeres no entendían el por qué del saludo ni quién era Han, saludaron con una sonrisa.

—Qué bueno, te ves mucho más cambiado, y además el color azul te queda fabuloso— lo inspeccionó con la mirada, Felix se ruborizó ante el halago.

—Muchas gracias, Han, tú también, es decir, ha pasado un tiempo.

No sabía y se debatía mentalmente si preguntar acerca de qué había pasado con Changbin, porque hace ratos que no tenía contacto con él, ni conexión ni lo había visto actualizar en las redes sociales después de años.

—¿Con quién estás, amor? Oh, hola— de repente un chico alto apareció, Felix lo conocía, estaba seguro de que sí, pero no recordaba muy bien de dónde o si había visto ese rostro antes.

Se dieron un beso frente a sus ojos y sintió cierta incomodidad por presenciar aquello.

—Oh, perdón, cierto. Seguro lo conoces, creo, bueno porque era del círculo de amigos cercano a Changbin— miró a su aparentemente pareja y le sonrió— Preséntate, cariño.

—Soy Minho, el novio de Han, un gusto— estrechó su mano amablemente y Felix hizo lo mismo.

Lee volvió a sentir la corazonada por su mejor amigo de escuela.

Tampoco se sorprendía del hecho de que haya conseguido novio porque, bueno, Jisung era un chico muy lindo incluso desde antes y un muy dulce joven, cualquiera podría caer a sus encantos fácilmente y además tampoco merecía llorar y sufrir por Seo durante años.

—Es un gusto, fui amigo de Jisung por un tiempo por intermedio de Changbin en la escuela.

—Espero verte de nuevo, Lixie. Cambié mi número—. agarró su teléfono y lo extendió al rostro del peliazul, quien lo tomó y anotó el suyo algo indeciso — Debemos irnos, hoy tenemos una cena, pero cuando quieras podemos volver a juntarnos y hablar de nuestro cambio.

¿Una cena? Pensó. ¿Sería el momento adecuado para preguntarles acerca de Seo?

Guardó su móvil con el contacto guardado y cuando estaban a punto de salir del local con algunas bolsas en manos, Felix volvió a llamar la atención del castaño.

—Sung, yo... ¿Sabes algo de él?

El castaño lo miró más serio.

—¿Hablas de Changbin? No, hace mucho no sé nada de él. Sólo pude enterarme de que literalmente se esfumó, pero SeungMin sigue subiendo fotos en instagram.
Lee asintió y lo dejó ir, con un último saludo.

Se despidieron, y por el resto de la noche, Felix lo pensó todo el tiempo.

A veces quería ignorar agresivamente su pasado, pero se dio cuenta de que no iba a poder, todo tenía relación, y con ello la extraña sensación de nostalgia que le había dado encontrarse con Jisung de nuevo.

Era como una brisa que llevaba sus recuerdos.

Se probó la prenda, nisiquiera le tomó mucha importancia a la figura que estaba parada frente al espejo, simplemente la compró y se fue.