Let me love you ~KooKMin~ 국민

Capítulo 24

Antes de empezar, perdón por tardar tanto. 

Pero en serio, este capítulo me tiene demasiado insegura. Lo siento

– Jisoo no es hija de tu padre –

Esas palabras de Jungkook acabaron con la poca estabilidad emocional que aún me quedaba...

Me aferré muy fuerte a él, sin tener el valor de hacer todas las preguntas que pasaban por mi cabeza, ni siquiera dudaba en que lo que dijo.

Jungkook no me diría algo tan grave si no estuviese muy seguro.

– Cariño – dejó besitos en mi cabello – tengo que explicártelo todo, no volví pronto como te dije porque –

– Kookie – lo interrumpí – por favor, no hablemos de esto hoy – un largo silencio volvió a instaurarse entre nosotros – sé que si dices algo así es porque es verdad, entonces dejemos esta charla para después –

No sé si él estaba de acuerdo o si quizás tenía algo muy importante que decirme, pero faltaban horas para su cumpleaños y no quería tener más cosas en que pensar. Quería que pasáramos un día "normal"

Aunque si, nada era normal en nuestras vidas. Desde que lo conocí nada fue normal entre nosotros, pero lo amo, maldición. Lo amo como a nadie en el mundo. La única persona más importante que él en mi vida, es Jisoo.

Namjoon, Jin, Hobi y Tae, incluso Yoongi también son muy importantes y los amo mucho, son importantes e indispensables en mi vida, pero Jungkook...

Él es el amor de mi vida. Debía dar lo mejor de mí para que al menos pasemos un día tan importante sin pensar en esas horribles personas.

– Ve a comer y luego vuelve a ser mi almohada – perdí luego de mucho debate mental – quiero tenerte muy cerca – empecé a dejar besitos sobre su pecho cubierto.

– Ya no tengo hambre, cariño y no tengo fuerzas para alejarme de ti ni por dos segundos – respondió levantando mi rostro y dejando un beso en mis labios. Me perdí en la intensidad de su mirada por un momento y, es que es imposible no hacerlo. 

– Kook, pero si tú siempre tienes hambre – volví a abrazarlo con fuerzas – no importa si estas triste, feliz, enojado o lo que sea, siempre eres un glotón – reí contra la piel expuesta de su cuello.

El pensar en que dormiría sin comer era algo que me estrujaba aún más el corazón, sabía que despertaría en medio de la noche muerto de hambre y no era bueno, de ningún modo lo permitiría ¡Jungkook se iría a la cama sin cenar sobre mi cadáver! 

– ¿Y si voy a cenar contigo, vienes? – pregunté alejándome sin mucho ánimo de su cuerpo – anda, no quiero que duermas sin comer, Kook – le mostré el puchero más sincero que pude formar y lo vi levantarse.

– En mi vida te diría que no si hay un puchero de por medio – se puso de pie y me tiró hacia él – eres el amor de mi vida ¿ya te lo dije? – me cargó como princesa y besó mis labios una vez más – te amo demasiado –

– Sí, ya me dijiste que soy el amor de tu vida como un millón de veces en estos casi dos años – me aferré muy fuerte a él – y también te amo mucho, demasiado – esta vez fui yo quien lo beso, intentando demostrarle cuanto lo amaba.

Siendo muy consciente de que él conocía muy bien la tormenta que tenía en mi interior, me decidí a olvidar todo por esa noche... Todo, sin excepciones. Seriamos solo él y yo. Jungkook y Jimin.

Durante la cena, solo nos observábamos, sin necesidad de poner en palabras lo que nos estábamos diciendo. Nos amamos, él es mi mundo y yo el suyo.