Capítulo 26

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Pov Namjoon

Han pasado tantos años desde que llegué a Seúl que, sinceramente, ya casi ni recuerdo como era mi vida antes.

Los años pasan rápido y no perdonan, me han tocado situaciones que no se las deseo a nadie. Pero también, he vivido cosas hermosas, he hecho recuerdos maravillosos junto a las personas a las que amo.

Mi vida dio un cambio rotundo luego de un estúpido acontecimiento cuando tenía 17 años. Un mal día para mí, pero más para ese pobre chico que había sido brutalmente golpeado por uno de nuestros compañeros. Nunca me ha gustado las injusticias por lo que, en un intento por defenderlo, golpee a su agresor y como estamos en un país en donde las escuelas son dominadas por políticos y alumnos con padres poderosos, terminé en graves problemas. Siempre fui buen estudiante y nunca di problemas, por lo que mis padres no iban a dejar que cometieran una injusticia conmigo y, cuando la escuela decretó mi expulsión dejando seguir en la escuela al verdadero agresor, todo se volvió un caos.

El padre era un político poderoso que había ido hasta mi casa a amenazar a mis padres. La señora Shin Hye estaba en mi ciudad natal en ese entonces y ayudo a mis padres en todo, pero fue en vano...

La ley no aplica para la gente que tiene poder.

Consiguieron que no me expulsen, pero debía cambiar de escuela. Fue entonces, cuando ella ofreció traerme a Seúl, enviarme a la misma escuela que su hija e incluso vivir con ellos hasta terminar la universidad.

Fueron días terribles para mí, no quería dejar mi casa, a mis amigos, a mis padres. Debía acostumbrarme a una nueva cuidad, a todo y no quería eso, pero era lo mejor, por lo que, con el alma rota, me mudé a la gran Seúl.

Recuerdo el día en que llegué, fui recibido por un pequeño pelinegro que saltó a los brazos de su madre en cuanto cruzamos la puerta, un niño con una sonrisa encantadora que, luego de notar mi presencia, me observó con tanta curiosidad e intriga, examinándome de pies a cabeza mientras hacia una mueca rara, sonreí un poco y  lo saludé.

– Hola, pequeño ¿Cómo te llamas? – me acerqué a él y desordené sus cabellos – mi nombre es Namjoon, Kim Namjoon – su sonrisa se ensanchó de forma inmediata e hizo que sus pequeños ojos desaparecieran en un par de líneas.

Tierno... Muy tierno. 

– Hola, tienes unos hoyuelos muy lindos – me extendió su pequeña manita – Park Jimin, soy su hijo – completó señalando a su madre con un dedo de su mano libre.

– Gracias, Jimin, es un placer conocerte – respondí en tono cordial.

– Eres un formal ¿Cuántos años tienes? – 

– Jimin, no preguntes esas cosas – interrumpió una hermosa jovencita – Mucho gusto, mi nombre es Jisoo. La hermana mayor de este niño –

– El gusto es mío, pero ya nos conocíamos – le recordé.

Ella y yo nos habíamos conocido cuando teníamos 12 años. Fue en un viaje en el cual se hospedó junto a su madre en el pequeño hotel de mi familia. Nuestros padres son viejos amigos, aunque cuando nos conocimos por primera vez pensé que éramos familia, Jisoo tiene un enorme parecido con mi padre, pero según ellos, son amigos de infancia.

– Lo sé, Namjoon. Pasaron años, pero aun te recuerdo – sonreí – ¿Por qué los chicos crecen tanto y yo sigo siendo un duende? – se quejó y luego me dio un cálido abrazo de bienvenida.

– Jisoo, lleva a Namjoon a su habitación, sean amables con él y Jimin, ven conmigo. Tuvimos un largo viaje y él necesita descansar – el niño se sentó en el regazo de su madre y empezaron a hablar mientras nosotros nos alejábamos.

Let me love you ~KooKMin~ 국민Donde viven las historias. Descúbrelo ahora