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Encendía el mechero una y otra vez escuchando el sonido de las chispas que ocasionaba al rozarlo rápido con la pequeña maquinaria que estaba encargándose de encenderlo.

Terminó de jugar con el, viendo que estaba un poco viejo, estaba segura que tenía mucho tiempo con el, hasta que ella lo había tomado.

Lamió sus labios aún viendo la llama encendida que había provocado con pensamientos tan negativos por todo lo que había pasado solo en un día.

Felix, su madre, el mechero y toda la mentira que había descubierto su madre de Olivia. ¿De donde demonios había sacado ese nombre? Ella no lo sabía, pero lo que sí sabía es que en esos momentos necesitaba un trago.

¿Han? Pues no había dado señales desde aquella mañana donde se la pasaron juntos, pensó que tal vez ella ya no le importaba, había logrado lo que quería, acostarse con ella.

____ no quería pensar que no la había llamado o escrito un mensaje por eso, pero las coincidencias eran demasiadas obvias.

Tenia miedo de enamorarse de un hombre como el, donde llegaba en horas de noche a su casa, que iba a clubs donde habían muchas mujeres, que se acuesta con su ex.

Eran muchas señales de que el no era bueno para ella pero aunque lo sabía no quería alejarse, desde que lo vio por primera vez se imaginó tantas escenas de los dos en diferentes momentos. Ella se había ilusionado.

El amor y la atención que no le había dado Felix pensó que Han se lo daría, se equivocó al pensar que el apartaría tiempo para ella y la trataría como una pareja de verdad. La primera duda llegó a su cabeza luego de estar sentada ahí casi toda la noche.

¿Que eran? ¿Pareja? ¿Aventura? ¿Estaban intentando las cosas? ¿Que carajo eran?

Suspiró. Escuchando la puerta de la habitación abrirse lentamente, se dio cuenta que alguien estaba mirando solo para asegurar si había alguien ahí.

— Está ocupado, puedes ir al lado —Avisó aún con sus piernas encima del sofá. Estaba cansada y quería poder distraerse un poco, no quería tomar su celular y llamarlo una vez más.

No contestó.

Soltó un gruñido de frustración soltando su celular llevando su cabeza hacia sus rodillas mientras peinaba su cabello hacia atrás. Tomó su mochila pensando en irse de ahí, sus padres no estarían en toda la noche y tenía la oportunidad de dormir en paz.

Al llegar a casa se había quitado toda la ropa apretada, poniéndose cómoda quitándose su maquillaje y todo lo que se había puesto esa noche. Empezó a ver el mechero que aún estaba en su cama, aún se preguntaba por qué su madre se alteró tanto por un maldito mechero.

Resopló, yéndose a lavar los dientes aún pensando en todo lo que había pasado solo en un día. Estaba muerta en todos los sentidos, ¿de verdad iba a permitir que su vida fuera así de dura? Ella no lo creía.

Escupió la pasta dental que había quedado en su boca, enjaguando su cepillo y su boca. El celular estaba sonando múltiples de veces y al ver quien era decidió contestar rápido.

— ¿Hola? —Empezó a hablar, se podía notar la emoción de la menor al por fin tener alguna señal de el.

— Quiero verte, te necesito —Escuchó como su tono de voz no era el mismo duro que antes. Estaba debilitado y se podía escuchar algunos sollozos de ¿Dolor? Se había preocupado.

— ¿Han? ¿Estas bien? ¿Donde estas? —Estaba totalmente preocupada, y se había sentido tan estúpida en pensar que estaba con otra.

— Yo no lo sé... —Escuchó como había intentado moverse pero había hecho un quejido de dolor —Creo que estoy en el bosque, puedo ver mi auto desde aquí, no sé cómo diablos llegué aquí.

Tenia dos opciones, llamar a la policía lo cual no era una buena idea ya que no sabía en qué mierda estaba metido y dos, decirle su ubicación y poder ayudarlo con lo que sea que tenía.

Estaba entre la espalda y la pared.

Sus padres no estaban ahí así que sería una buena idea llamarlo y pasar la noche con el, pero sería una mala idea hacerlo porque no sabía a qué hora llegarían. La vecina era muy curiosa, si deja que pase por la puerta de enfrente ella se dará cuenta y será una mierda para cuando su madre llegara a casa.

Pero no le importó, no tenía ni idea si Han estaba herido o si se está muriendo en el bosque, suspiró para volver a escucharlo preguntar si aún estaba en la línea.

— ¿Puedes conducir? —Sabía que se iba a arrepentir de eso.


































He hecho más de 3 versiones de este capítulo y la única que me convenció fue este. Es una mierda, pero son las 2:56 de la mañana y ando cansada.

DIRTY┃HAN JISUNG. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora