Cap 42

178 15 0
                                    

2

Emilio se comportaba más cariñoso que nunca, siempre estaba pendiente de cada uno de sus movimientos y necesidades, si Joaquín se resbalaba o se tropezaba la mano de Emilio estaba ahí para sostenerlo, si una corriente de aire lo rozaba lo cubría en sus brazos o le ofrecía un suéter.

Emilio definitivamente era un novio meloso, Joaquín se sentía en las nubes, era todo tan maravilloso, estaban justo ahora esperando tomar su vuelo hacia New York, estaban tan nerviosos ambos, las manos de Emilio se retorcían alrededor de un folleto, el chico estaba sentado junto a su papá quien se le veía muy feliz y orgulloso, de vez en cuando pasando su mano por el cabello de su hijo; mientras que Joaquín se encontraba al lado de su mamá, el también podía sentir los nervios de su mamá pero ambos se consolaban mutuamente.

-Cariño ¿quieres ir con Emilio?- pregunto su mamá

Joaquín se ruborizo, seguramente su mamá había visto que estaba con la mirada clavada en el mayor, ante la pregunta de la mujer solo movió su cabeza de un lado a otro, no quería interrumpir el momento entre Emilio y su papá.

Sabía que Emilio había extrañado demasiado a su papá las últimas semanas, no era que no lo hubiera visto era solo que no habían tenido tiempo juntos como padre e hijo, era bueno ver a Emilio con su padre, se le veía con un brillo único, el chico amaba demasiado a su papá.

De hecho él y Emilio no habían tenido para nada tiempo libre estas semanas, después del viaje a la playa, todo lo que habían hecho era trabajar y trabajar, exceptuando la fiesta del cumpleaños de Diego, del cual Joaquín se había arrepentido mucho pues después de esa fiesta habían tenido unos ensayos y estaba muerto, por lo que tomo la sabia decisión de no salir a fiestas o distracciones libertinas mientras tuviera una agenda llena de trabajo.

Aunque este viaje se le parecía mucho a algo contrario a trabajo, lo estaba disfrutando mucho y aun ni comenzaba, desde que se había enterado de la boca de Emilio no podía parar la felicidad que sentía, Emilio fue tan lindo cuando le dio la sorpresa.

Después de esperar al fin pudieron abordar el vuelo y Joaquín se sentía con más nervios que nada, Emi, su novio “Que dicha poder llamarlo así” se sentó junto a él y muy discretamente tomo su mano y le dio un suave apretón

-¿No estás nervioso?- le pregunto

-Claro que sí, pero estoy tan feliz, esto es un evento único en la vida

Emilio sonrió y se recostó en su asiento suspirando

-Sí, yo también estoy muy emocionado, vamos a conocer a grandes artistas en el evento

El resto del vuelo fue tranquilo aunque a Joaquín se le retorció el estómago con los nervios y le sudaban las manos, no fue nada grave.

Ambos estuvieron muy sorprendidos cuando al aterrizar había fans esperando, les dieron regalos pero desgraciadamente no pudieron estar mucho tiempo pues sino llegarían tarde al hotel.

Ya por la noche vestidos y preparados, Joaquín creía que Emilio haría un hueco en el piso pues no dejaba de caminar de un lado al otro y de pasar su mano por el cabello en un signo de nervios, ya había arruinado su peinado dos veces, la estilista estaba que echaba fuego; el por otro lado no paraba de retorcer sus manos y la vista de su novio nervioso para nada era un consuelo, tampoco ayudo el que Santiago estuviera casi teniendo un ataque de nervios y risa en uno de los sillones, todos estaban demasiado nerviosos.

Al llegar al evento se pusieron casi eufóricos, todo era tan hermoso, todos eran tan amables con ellos, e inclusive hubo personas que les pidieron tomarse fotos con ellos, Joaquín y Emilio no cabían de la felicidad.

Si Supieras Que Te Quiero (EMILIACO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora