Doble vida (BrandisxPhoenix)

🍀 Especial: Día de San Patricio 🍀

Era Sábado por la noche. El día de San Patricio era uno de los días festivos favoritos de River y Jonathan ya que podían juntarse con todas sus amistades para reirse y emborracharse un poco. Para ellos salirse un poco de la rutina cotidiana, bastaba.
River y Jonathan se estaban terminando de cambiar cuando finalmente, Phoenix habló.

—¿Qué tal me veo, Jona?—dijo el rubio. Llevaba una camisa de color blanca y arriba de ella un sueter verde. En el mismo se podía observar un trébol de tres hojas prendido en la prenda.

—Te ves perfecto—dijo y lo besó—Como siempre.

—Tú no te quedas atrás—dijo Phoenix correspondiendo el beso.

Brandis llevaba un buzo verde con una estampa de trébol en el medio de ésta.

—Vamos al auto, los chicos van a estar esperándonos en el bar—dijo el castaño.

River accedió.

—Muero por una cerveza Guinness—soltó Phoenix con una sonrisa.

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Al llegar, ambos pudieron observar que el bar estaba repleto de gente. Por suerte, Jonathan había reservado la mesa con días de anticipación. River pensó por sus adentros:"¡Gracias por ser tan organizado, Jon!"

River sacó las llaves del auto, se arregló un poco la camisa,miró a su esposo y habló.

—¿Listo?

—Listo.

Y ambos bajaron del auto.

Al entrar, Jonathan vio a sus amigos unos pasos adelante de ellos esperando en la barra. De verdad que el bar estaba repleto de gente. Escuchó con detalle en compañía de su esposo.

—Oye amigo cuántas veces tengo que decirte que tenemos una maldita mesa esperándonos a todos nosotros?—objetaba Depp.

—Ya le dije que no hay ninguna mesa reservada a nombre de Depp, señor.

—¡Rayos!—dijo Feldman—¿Dónde están los otros dos?

—¡Esto está abarrotado de gente!—maldijo Wheaton. Jerry asentía.

—Que lindos. Me agrada que estén todos de verde—se limitó a decir Keanu con su sonrisa característica. Sandra se apretujó sobre el cuerpo de su novio.

Depp lo miró incrédulo, enarcando una de sus cejas. Aún así, pensó por dentro que ese Keanu era realmente un agradable sujeto. Presentía que tenía un gran corazón pero claro, jamás lo admitiría.

—¿Cómo es el apellido de la pareja feliz?—interrogó Depp luego de volver de su laguna mental.

—Lo lamento, señor—interumpió el cantinero—Solo pueden entrar si está la persona que tomó la reserva de la mesa.

—¿Bromeas?—habló Depp.

—Lo siento, señor.

—Genial—habló Jerry—¡Esto es todo!

Entre risas, Jonathan y River se acercaron a la barra.

—¡No nos extrañen tanto!—habló River.

—¡Al fin!—dijeron Depp y Feldman al unísono.

—¡Era hora!—habló Wil.

—Tarde—dijo Jerry.

—Bien,  bien—habló Jonathan—¡Aquí estoy!—siguió—Buenas Noches, reservé una mesa para nueve personas a nombre de Jonathan Brandis.

—Permítame el número de orden para verificar que es usted señor.