CAPITULO XXIII

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Un nuevo día soleado comenzaba a cubrir la ciudad de Danbury. El día para nada se correspondía con la oscuridad que tenía River Phoenix en su corazón. Oscuridad, que se reflejaba en sus preciosos ojos celestes. Todavía le costaba entender que Martha Brandis no existiera. Se sentía desilusionado. Por primera vez, sentía que estaba realmente enamorado y de repente, su idilio se derrumbaba como un castillo de naipes. Compartir una charla con su amigo Keanu había sido reconfortante. Intentaba pensar en sus sabios consejos, pero de alguna forma, sentía que su prejuicio podía más.

Suspiró hastiado. Estaba derrumbado. Si fuera por él, ni siquiera pisaría la escuela nunca más. No quería cruzarse con Jonathan Brandis. Una parte de él, lo detestaba. La otra...no entendía lo que le pasaba a la otra parte. Tenía sentimientos encontrados.

Esta vez, llegó temprano a clase. Jonathan aún no había llegado. La profesora tampoco. Caminó hasta su asiento y lanzó su mochila con enfado.

—Hey amigo, ¿Qué pasa? ¿Por qué esa cara?—preguntó Wheaton.

Phoenix no respondió. Estaba abstraído en un punto fijo.

—¿Qué pasó soldado?—añadió Feldman socarrón—¿Noche frustrada de sexo?

River rodó los ojos, molesto.

—¡Ya cállense idiotas!

—¡Vaya!—se metió O'Conell—¡Qué carácter niño bonito!

—Parece ser que Martha lo dejó una vez más insatisfecho...—completó Feldman, burlón.

El rubio no lo soportó más. Miró a Feldman, Wheaton y O'Conell con furia.

—Escúchenme bien, idiotas—gritó—No quiero que vuelvan a mencionar el nombre de Martha Brandis nunca más ¿entendieron?

Los tres chicos se quedaron paralizados ¿Qué rayos le ocurría a Phoenix? ¿Por qué se comportaba tan hostil? Hasta hace unos días estaba feliz porque había oficializado su noviazgo y de repente, parecía odiar a Martha. En ese momento, un silencio se hizo presente en el aula. Todos los presentes estaban sorprendidos. Jonathan Brandis había vuelto. Parecía distinto, como si algo hubiera cambiado en él. Pero una pregunta rondaba en la cabeza de todos ¿Dónde estaba Martha Brandis, su hermana?

Sin siquiera mirar a nadie, Jonathan se sentó en su lugar de siempre junto a Winona. No hicieron falta palabras entre ellos.

—¡Vaya!—comentó Feldman—Al fin volvió el idiota de Brandis.

—Sí...parece distinto—comentó Wheaton observándolo sin más—¿Qué piensas Riv?—preguntó el chico, viendo como River miraba a Brandis con furia.

—¿Qué pienso de qué?

—De Brandis, tonto.

—Pienso que me importa un carajo—respondió Phoenix.

Feldman se atrevió a preguntar.

—¡Vaya qué carácter!—dijo Feldman—¿Y Martha? ¿Dónde estará? Siempre es muy puntual.

River sonrió sardónico.

—No creo que volvamos a verla, Feldman—respondió.

—¿Por qué lo dices? ¿Te has peleado con ella?—interrogó Wheaton.

—A lo mejor se enteraron de su excelente desempeño en nuestro equipo y las "LadyBugs" de Chicago reclamaron su presencia—agregó O'Conell pensativo.

—¡Olvídenlo!—añadió Phoenix—Martha no regresará y punto.

Los chicos se miraban extrañados. No entendían la actitud esquiva de River y menos entendían que Martha hubiera desaparecido de un día para el otro, sin siquiera despedirse.

Doble vida (BrandisxPhoenix)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora