Por fin había llegado el día. Hoy se jugaba la final del campeonato de Soccer. Todos los chicos estaban emocionados. Esperaban ganar la copa para consagrarse campeones de la liga. Después de todo, llegar a semifinales no era nada fácil y mucho menos, si tu rival era el "DC United", la promesa juvenil del momento. Los diez jugadores del equipo del entrenador Lee llegaron al campo de juego. Se habían bautizado "The Sidekicks". El entrenador les dio una charla motivadora antes de comenzar el juego. Esperaba que todo saliera bien y que nadie se dejara llevar por los nervios de una final.
—Escuchen chicos—comenzó el entrenador observando a su equipo—y chica...—se corrigió mirando a Martha—Hemos llegado a la final del campeonato y todo esto es mérito de ustedes...No importa quién gane o quién pierda—añadió—Aunque si ganamos mejor...
Todos lo observaron estupefactos. El entrenador carraspeó y prosiguió.
—Lo importante es saber que en este juego, no hay enemigos. Sólo rivales—continuó fijando su vista en Phoenix y Deep que se miraban desafiantes—Y eso me recuerda Señores...—agregó con la vista fija en ambos chicos—Canalicen toda su maldita ira y concéntrense en el juego—finalizó con una sonrisa, mientras observaba como los miembros de su equipo le sonreían también— ¡Ahora salgan a jugar y dejen lo mejor de ustedes! ¡A patear culos!
Todos emitieron un grito de victoria y se dirigieron al vestuario a cambiarse, en tanto el entrenador Lee se dirigía a la mesa principal de inscripciones para confirmar su equipo. Allí, un hombre con cara de pocos amigos, lo atendió.
—¿Equipo?—preguntó el hombre sin siquiera saludar.
—¡Buenas tardes!—saludó el entrenador Lee observándolo fijamente—Equipo "The Sidekicks" de Danbury, EE.UU.—finalizó.
El hombre de la mesa asintió. Tomó una hoja que contenía los datos del equipo y comenzó a leer los nombres.
—Bien, le leeré la lista de sus jugadores y usted me confirmará si está todo en orden ¿correcto?— preguntó.
—Correcto—respondió el entrenador.
El hombre asintió satisfecho.
—Veamos...—dijo leyendo la lista—Brad Pitt, Leonardo Di Caprio, Johnny Deep, Corey Haim, Mat Dillon, Wil Wheaton, Jerry O' Conell, Corey Feldman, River Phoenix y...—prosiguió—Jonathan Brandis, ¿es correcto?—preguntó observándolo.
El entrenador se paralizó. Había olvidado que el chico Brandis no estaba presente pues participaba de un partido en otra ciudad. Carraspeó nervioso.
—No, no....Hay un error—agregó.
—¿Qué no compite el mismo equipo que el año anterior?—se aventuró a cuestionar el hombre.
—Si, sí...pero ha habido un cambio por cuestiones de fuerza mayor—comunicó el entrenador— Jonathan Brandis no jugará. Jugará su hermana, Martha Brandis.
El hombre dejó escapar una carcajada sardónica.
—¿Una mujer reemplazando a un hombre?—preguntó burlón—Disculpe entrenador...pero el soccer es un deporte, no un club de té—finalizó.
El entrenador Lee respondió con enojo.
—La señorita Brandis es una excelente jugadora—añadió—Tanto, que está a la par de su hermano y de sus compañeros.
El hombre lo miró estupefacto.
—De todas formas...—añadió—¡No puede jugar! Es una mujer y este es un campeonato para hombres.
River, quien salía de los vestuarios y notaba la discusión que mantenía su entrenador con el sujeto de las mesas, se acercó para ver lo que ocurría.
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Doble vida (BrandisxPhoenix)
أدب الهواة¿Qué locura serías capaz de hacer por amor? Dos chicos. Un alocado plan. Un amor que rompe todas las barreras. Una historia que te va a enamorar.