Cuatro meses después
–Ey, Jay – me llamó el jefe de prensa del club – Sería genial que a la salida contestaras algunas preguntas. Todos quieren entrevistarte después del hat trick de esta noche.
Resoplé cansado pero asentí con una sonrisa en su dirección. Todavía seguía con mis compañeros en el vestuario celebrando la victoria.
–En unos minutos salgo.
–Genial, te espero fuera – dijo antes de volver al pasillo donde unos metros más adelante esperaban todos los periodistas. Que no me gustaba demasiado hablar con ellos eran un puto hecho, pero entendía su trabajo, y en días como hoy donde me había salido un partidazo todo lo veía mejor.
Y es que esta temporada el equipo había empezado jodidamente al cien por cien, y puede que estuviera mal decirlo, pero sobre todo yo. Me había currado como el que más la pretemporada, y el trabajo físico y técnico que había hecho cada día incluso en mis vacaciones estaba dando jodidos resultados. No habíamos perdido ni un solo partido en liga, aunque si teníamos algún empate, y tampoco en la Champions o en la FA Cup.
–Jayson, te vienes a celebrar a casa de Thomas, ¿no? – me preguntó uno de mis compañeros.
–Claro. Tengo que pasar por la prensa, pero luego voy directo allí – respondí cogiendo mi móvil, cartera y las llaves de mi Ferrari.
Mientras salía del vestuario revisé mi móvil y me encontré con bastantes mensajes felicitándome por el partido y los goles. Mis amigos, familia, y, Chloe; entré en el chat de su conversación.
Chloe: Felicidades, Jay
No esperaba menos de ti esta noche ;)
Yo: Yo tampoco, la verdad
Me reí mientras escribía la respuesta.
Me voy a casa de Thomas con algunos compañeros
Te invitaría pero sé que te vas a negar porque mañana tienes que madrugar
Chloe: me conoces bien
Me llego su respuesta en seguida. Se había conectado al recibir mi primer WhatsApp.
Chloe: te llamo mañana?
Yo: más te vale
Respondí acompañado de un par de emojis sonriendo seductoramente.
Tener a Chloe en mi jodida vida era de las mejores cosas que me habían pasado desde que estaba en Londres. Habíamos estado juntos de vacaciones en Maldivas, y había sido justo lo que necesitaba para olvidar todo lo que había pasado en Boston. No había estado allí ni un par de semanas, pero lo había sentido como todo un mes. Y es que desde aquella noche en la puta discoteca todo se había descontrolado. Había actuado seguido por mis instintos más básicos al tener a Jamie tan cerca, tanto tiempo después, escuchar sus jodidos reproches, sus putos gritos, y, joder, que dudara de si la había olvidado, que me descontrolé y solo se me ocurrió besarla. Lo que pasó después ni siquiera hoy me lo puedo explicar era como si nuestros jodidos cuerpos, porque ella tampoco dudó un solo momento, necesitaran aquello, necesitaran sentirse.
Los días siguientes fueron una puta mierda. Sentía una mezcla de culpa por lo que había pasado y rechazo hacia mí mismo por haber caído de nuevo, pero es que Jamie seguía siendo superior a mí, y eso no me gustaba jodidamente nada. Como tampoco que durante cuatro años hubiera estado pensando que días después de dejarlo me estaba enrollando con Meghan en el puto aeropuerto. ¿Cómo cojones se podía haber creído eso? Joder, por mucho que lo hubiera visto, muy mal lo habíamos hecho en nuestra relación si confiaba tan poco en mí. Ahora entendía porque me miraba con esa rabia y odio, nunca había entendido porque se sentía tan jodidamente dolida si era ella la que había decidido no venir conmigo y luego irse. Aunque para desaparecer como lo hizo aquel puto beso que vio no era ninguna jodida justificación.
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Quiero Amarte#3 Trilogía EDL
Teen FictionCuatro años, cuarenta y ocho meses, más de doscientas ocho semanas, mil cuatrocientos sesenta días y más de treinta y cinco mil horas. Ese es el tiempo que Jamie y Jayson llevan sin verse. Cada uno ha seguido su vida intentando no saber nada de la d...