Secretos En El Palacio [PUBLICÁNDOSE]

《Capítulo 64》

64. Un día único

-Al fin llegamos- dice Ame al ver la entrada de la ciudad 

-Si- le contesto -¿Quieres dejar el caballo aquí y seguir a pie?-

-Si, supongo que así va a ser más rápida la búsqueda de información-
Baje primero yo y después ayude a Ame, ate al caballo a un poste donde estaban los demás
-Muy bien ¿Por donde empezamos?- pregunta Ame

-No tengo la menor idea. Caminemos por la calle principal donde están los comercios. En este horario es probable que la mayoría de los campesinos vayan a comprar-

-Tienes razón. Vamos- me queda mirando un rato -Tu nos tienes que guiar- mueve la mano pata que camine adelante de ella -Yo nunca vine, así que nose por donde es-

-A claro, perdón, me había olvidado- empiezo a caminar y Amelia camina atrás mio -¿Y.. porque es que nunca viniste?-

-Siempre he estado en el palacio, nunca tuve la necesidad de salir. Nos llevaban todos los insumos asi que nunca tuve que salir a comprar algo y no me habían mandado a investigar algo hasta ahora-

-Ya veo... y nunca te dio curiosidad salir. Ver como son otras partes del reino...-

-No. Desde chica me ha gustado estar en el palacio, no me he sentido sola ni abandonada. Además no puedo decidir por mi misma lo que quiero hacer, aunque no me molesta. Desde muy joven ya sabia que seria sirvienta-

-¿Siempre quisiste ser sirvienta?-

-Supongo que si, no lo he pensando en realidad. Era algo obvio de hacer, no tenia otro camino, pero estoy bien así, me gusta mi vida ¿Tu porque te has convertido en guardia?-

-Mi padre lo es. Así que es algo que tenía impuesto desde chico, tuve que empezar a entrenar desde muy temprana edad. Pero es algo bueno, soy bueno en lo que hago, y creo que es lo único para lo que sirvo, en manejar una espada-

-Todos somos buenos en algo. Pero no creo que lo tuyo sea solo manejar una espada. Piénsalo, si no hubieras sido entrenado desde chico, el príncipe Leonel no tendría un amigo. Creo que aveces el destino nos pone en determinadas situaciones para no estar solos-

-¿Y tu destino cuál seria?-

-No lo se. No me lo había puesto a pensar-

-Si mi destino era ser amigo del príncipe Leonel. Tal vez el tuyo es ser amiga de la Duquesa-

-Eso tiene sentido. Pero no lo creo, apenas cruzamos miradas, menos palabras. Pero el príncipe Cain quiere ser mi amigo, por ahí él es mi destino-

-Prefiero que tu destino sea ser amiga de la Duquesa- se empieza a reír

-¿Qué.. no me digas que estas celoso del príncipe Cain?-

-Eso no te lo voy a decir-

-Esta bien- dice por ultimo

🛡

Caminamos un poco más y ya habíamos llegado a la calle principal, había un poco de movimiento pero nada fuera de lo común.
-Así que esta es la calle principal he... hay varias tiendas-

-Si... hay verduleria, carnicería, panaderías, joyería, modistas, mercerías, bares, restaurantes... entre otras cosas- dirijo mi mirada a Ame y veo como sus ojos van de un lado a otro, mirando hasta el último detalle -¿Donde quieres ir primero?-

-No estamos de paseo- me responde -Tengo que ir a un lugar donde vayan todas las mujeres, pero en especial quiero encontrar a una curandera. Creo que es la mejor opción- empieza a caminar y a mirar los distintos puestos, yo la sigo desde atrás pero dándole su espacio para que ella decida a donde ir.
Estuvo caminando mirando puesto en puesto por un buen rato, hasta que se pone a hablar con la señora que vende joyas, me acerco más a ellas para escuchar.
-¿Qué estabas buscando linda?- le empieza a decir la señora -Si estabas buscando algo para vos creo que este collar de zafiros te quedaría muy lindo-

-Muchas gracias, pero en realidad quería saber, si conoces a alguien que sepa sobre leyendas o enfermedades raras y como curarlas- empieza a hablar Ame -Mi.. hermana, empezó con mucha fiebre el martes y no se despertó desde ese entonces- mientras que ella habla yo veo todas las joyas que estaban sobre la mesa.
Eran lindas joyas... pero ninguna me convencía.

-Lo siento linda, yo nose mucho de eso. Sabes quien puede saber, la señora de la mercería, mira queda a dos cuadras más adelante, su local tiene las paredes de color celeste claro, la vas a encontrar enseguida-

-Entiendo. Gracias por su ayuda- le dice Ame por último -Sebastian... vienes-

-Tu ve... ahora te alcanzo- se da la vuelta y empieza a caminar