La Dama y La Criada © [GL] (Borrador)

Capítulo 32

La noticia rueda por todo Londres y sus alrededores, el consejo de ministro y algunos gobernantes se hicieron notar al llamar y visitar al rey en su morada para saber si todo se encuentra bien.

Los medios de comunicación se encargaron de llevar el mensaje de que todo fue un malentendido y lo más importante para Guillermo "No hubo pérdidas que lamentar".

Los campesinos sin hogar se encuentran devastados, lo único que quedó de sus casas y algunos familiares fueron cenizas. No podían soportar el dolor de las pérdidas y el enojo al enterarse de que Guillermo no hará nada para resolverlo.

Y menos lo hará, su atención total está en Emily. En este momento desea con todas sus fuerzas correr a los ministros y los gobernantes para dedicarse a ello.

Deseaba encontrarla lo más pronto, pero al parecer le tomará tiempo, eso según algunos guardianes que le informaron que no hay rastro de ella.

En el palacio, la reina se enteró de lo que sucede en las afueras y por seguridad, la mujer tiene que permanecer dentro de su aposento. Está muy preocupada por la información que le llegó sobre el escape de Emily.

Siente que la situación se les está escapando de las manos y teme que suceda algo malo.

Por otro lado, el chisme también llegó a los oídos los empleados. El incendio que lamentaban y el escape de un empleado.

Algunos estaban contentos y otros no estaban de acuerdo, por el hecho de que hay personas allá afuera que necesitan el trabajo.

Ivy quedo sorprendida al escuchar al amigo de Anastasia decir lo que estaba sucediendo, aun así, ella corrió hacia la habitación de Angie y no dudó en comentarle lo que está sucediendo.

La expresión de la princesa se tornó a sorpresa, su corazón bombeó de manera irregular al escuchar lo que estaba sucediendo.

Pensó en la campesina, en su hogar, en la única familia que tiene. Tenía miedo de lo que le pueda estar pasando así que corrió hasta llegar a la salida. Tenía que ir a verla, ayudarla si es necesario, pero su madre y los guardianes fueron impedimentos para sus planes de última hora.

Ahora tenía que compartir en el salón, la visita de algunos ministros y no solo eso, sino la visita de la familia Jones, sacando a su mejor amiga Chloe que también está un poco preocupada. Sin embargo, Angie tenía la vista fija en Fernando y este le correspondía la mirada muy sonriente.

Lo sabía, lo supo en el momento en el que le sonrió de manera despiadada e inhumano.

— Tú provocaste ese incendio... — susurró, aunque trató de que lo dicho fuera para ella, sin embargo, el tono de voz salió de manera normal logrando que la reina y los Jones escucharan.

El rostro de Fernando se torna a confuso, con su entrecejo fruncido logró borrar esa sonrisa de victoria para optar una de inocente.

— ¿De qué estás hablando? — la madre de la princesa observa a su primogénita incrédula por lo que acaba de escuchar y junto a ella los padres de Fernando.

Chloe conoce a su amiga muchísimo y en estos días no ha podido hablar con Angie sobre lo ocurrido, solamente se había enterado por medio de una llamada hecha por la princesa, que Fernando la descubrió besándose con Anastasia.

Y al escuchar las acusaciones no puede evitar estar de acuerdo con ella. Por fin Angie estaba dándose cuenta de lo que en realidad es capaz de hacer el Duque, que será rey de Inglaterra.

— ¡Él fue el que provoco ese incendio! — un poco alterada se levanta de su asiento y se acerca de manera amenazante a él que luce una máscara que logra engañar a todos en el lugar — ¡Eres un cobarde! ¡¿Por qué no te metes conmigo?! ¡Qué necesidad había de atacar esa gente que no te ha hecho nada!