-OMEGACEMBER- Jayce/Viktor

-construcción del nido-

Blitzcrank era el proyecto de Viktor que llevaba ahora en el sótano de su hogar, era el deseo que le había llenado después de saber que esperaba su primer cachorro. Los doctores estaban preocupados por la fragilidad del omega y su reacias ganas por seguir órdenes para descansar y comer adecuadamente. Estaba un poco harto de que Jayce lo siguiera a todos lados, cuidando donde pisaba, lo que comía y hasta a donde dirigía la mirada. Habían quitado todo objeto y químico peligroso de su laboratorio y media academia estaba pendiente de cada movimiento de articulación que el joven futuro padre hacía. No ayudaba en nada de que Ekko, Vi, Caitlyn, Heimerdinger, la concejal Medarda, y cada persona importante de Zaun y Piltover le tomarán la palabra a su marido, hasta su suegra, que estaba seguro lo odiaría hasta su muerte, había cambiado mucho con él, hasta le decía hijo ahora, le llevaba comida al laboratorio y a la casa, le pidió a Jayce que pensara en la idea de mudarse a la casa Talis, para que pudiera cuidar de el bebé y Viktor.

Acaricio su abultado vientre de casi siete meses y pensó si no tendría dos cachorros en lugar de uno. El sonido del motor del gran pecho de Blitzcrank se comenzó a escuchar en cuanto dio algunos comandos. Terminó por meterse completamente y se dio cuenta que era muy cómodo y caliente ahí dentro, con el sonido del motor y todo. Pero aun así, algo faltaba.

Con cuidado salió del gran pecho metálico y camino a la habitación principal, sacó todas las cobijas y almohadas, tomó la ropa de su marido y la arrastró de regreso al laboratorio. Con cuidado comenzó a meter y ordenar todo hasta que estuviera lo suficientemente perfecto para meterse en él y dormir la siesta. El olor en la ropa de su alfa, las cobijas de la cama con el olor de los dos combinados y el suave sonido del motor de Blitzcrank lo hizo dormir.

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—¡Viktor, llegue cariño!

Jayce gritó mientras cerraba la puerta del recibidor, camino extrañado por la sala sin ver rastros de Viktor, ni en la cocina ni su habitación, donde encontró la cama sin cobijas y el guardarropa hecho de girones. Mientras caminaba hacia el laboratorio, se preguntó si ya había llegado a esa época del embarazo. Pensó rápidamente en Vi, y en cómo hace un año había entrado apurada a su propio laboratorio en la academia, pues su esposa se había apoderado de sus guanteletes hextech para su nido y no había poder humano que se los quitaran. El decidió sabiamente esconder su martillo en el cuarto mes, por si las dudas. Aun así sonrió por el recuerdo y pensó en la dulce bebé Elizabeth de tan solo tres meses, sentía un poco de envidia, él ya quería tener a su propio cachorro en los brazos.

—Cariño...—Susurro para no asustar a su marido si es que estaba ocupado.

Ronroneo indudablemente por la vista que se le presentó. Blitzcrank estaba casi completo, el pecho servirá como una cavidad para guardar una mano mecánica y como transporte o "maletero", adentro se encontraba Viktor hecho ovillo protegiendo su abultada barriga y lleno de ropa suya y las cobijas faltantes en la cama. Cuando se acercó el rugido del motor del robot sonó mas fuerte y los focos que tenia por ojos resplandecieron.

—Tranquilo amigo, soy Jayce, no le hare nada a Viktor...—le dijo levantando las manos como si lo atraparan.

Dio un paso adelante cuando las luces bajaron su intensidad. Con cuidado acarició la frente de Viktor, y lo vio removerse tranquilo.

—Hola omega, ¿Puedo pasar a tu nido?

Viktor sonrió lánguidamente mientras asentía, algo dentro de Jayce se removió feliz, más bien su parte alfa, al ver la demostración más pura de amor de su omega. Dentro de Blitzcrank solo cabía sentado, así que acomodo entre sus piernas a su esposo, quien volvió a cerrar los ojos ronroneando feliz al estar en su nido con su protector alfa. 

*Imagen por fruity_monster_