¡Eres mío! (Censurado)

Capítulo 21

Capítulo 21

No salió de la casa por los siguientes días, se sintió exhausto por sus propios sentimientos que de alguna forma fueron apaciguándose lentamente. Su estado había ido mejorando en el último mes, pero la simple presencia de Craig le había hecho olvidar de quien era por un instante.

Cocinó comida rica y elaborada para Pete cada día en el que estuvo en casa. Quizás era algo tonto, se había sentido mejor con cada mañana en la que se despertaba y podía rechazar lo que Craig le enviaba.

Se había tardado en entender que no necesitaba nada de Craig, sino que era él quien lo necesitaba, quien estaba solo la mayor parte del tiempo a causa de sus decisiones.

Entonces supo que ya no debía paralizarse por lo que sentía y por el dolor pasado. Se lavó el cabello restregándose con gran energía para que volviera a su color natural, se vistió y fue al café a pesar de que llegaba tarde a su turno.

Jason lo miró con una sonrisa y frotó su cabello húmedo.

—A partir de ahora solo vas a cobrar o servir en las mesas, ¿entendido? Nada de limpiar —le dijo. Sabía que Pete o Mike le habían informado de su estado.

Asintió antes de colocarse el delantal negro con el logo del local, había extrañado el intenso aroma a café y a almíbar de los panes. Si había un lugar en donde pudiera sentirse mejor, definitivamente sería allí.

Preparó los pedidos que Jason le traía con mucha habilidad y rapidez, llevaban poco tiempo de haber incorporado las nuevas recetas que Tweek les había propuesto; así que era inevitable que la responsabilidad cayera sobre rubio ya que era el que hacía la presentación más prolija de los tres.

—Tweek, iré a comer algo —le indicó Jason para que tomara su turno en las mesas.

La hora después del medio día era poco concurrida, podía estar solo sin problemas para ocupar los tres puestos al mismo tiempo. Atendía a los clientes, preparaba el pedido y luego cobraba.

La alarma de la puerta sonó cuando se abrió, Tweek limpió rápidamente la máquina de café y tomó una de las cartas recientemente plastificada para mostrarla. En la medida que se iba acercando a la mesa su paso se volvió más lento e inseguro, Craig lo miraba con el mismo rostro de siempre, pero había algo de emoción no expresada en él.

Se mordió los labios y frunció el ceño, no podía saber si el hombre estaba burlándose de él o si buscaba lograr algo yendo allí.

—¿Qué quieres? —le preguntó de forma brusca.

Craig parpadeó como si no entendiera la pregunta, movió sus labios de forma insegura antes de finalmente hablar.

—Café —contestó.

Tweek sintió que el hombre estaba jugando con su paciencia.

—Esto es una cafetería, por supuesto que voy a darte café. Pero dime qué café quieres —dijo en un tono sobrante.

Craig no bebía café, solo lo había hecho cuando le robó el que estaba escondiendo y en el planeta 12 cuando viajaron allí. Tweek sabía muy bien que no tenía idea de los tipos de café existentes y que debía darle la carta como a todos los clientes antes de tomar su orden, pero quería ser un poco malo y verlo confundido.

Estaba claro que había ido allí solo para seguirlo.

Otro cliente lo llamó para que se acercara, solo entonces dejó la carta encima de la mesa para irse.

—Llevas días sin venir, ¿ocurrió algo? —le preguntó el hombre que era un cliente habitual.

Era de las personas que le dejaba propinas grandes, por lo que siempre lo trataba con una sonrisa y total amabilidad. Sabía que le gustaba, que había comenzado a ir con frecuencia solo para verlo a él.