Capítulo 26 .-¿Podrías ?

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-Hey Pure, mira, mira quiero presentarte a Tenochtitlan, Tita él es Perú alias el puré o el palomo o enaAAA...

Antes de que México pudiera continuar con su larga lista de apodos, Perú decidió ponerle un alto al tricolor con una patada en la entrepierna.

-Disculpa Tenochtitlan simplemente es para que Mex se quede callado lo suficiente para que me pueda presentar, Mi nombre es República del Perú, solo dime Perú es un gusto conocerte- Explicó el recién llegado con cierta tranquilidad.

-Eh... El placer es mío, si te es difícil decir mi nombre puedes llamarme Tita no hay problema

-Descuida para mí no es difícil, eso dejaselo a los del viejo continente... ¿Puedo saber porque no te conocimos antes?

El de la bandera bicolor parecía bastante curioso pero Tenochtitlan era consciente que no podía ir por ahí diciendo "Parece ser que fui secuestrada por alguien que no recuerdo y termine durmiendo por décadas hasta que fui despertada por ONU el cual me cuido hasta hace poco que nos empezaron a perseguir conocidos de USA y nos separamos entonces termine conociendo a Alemania en mi casi lecho de muerte y me trajo aquí" ... Si definitivamente no debía decirlo aunque era un buen resumen.

-... Porque chingas a tu madre PISHI ENANO OJETE

Para bien o para mal México intervino... Y ahora ambos countrys estaban en un duelo casi a muerte con cuchillos.

-... ¿Cómo se fue está situación a extremos?- Se cuestionó la ex capital observando al par en su discusión bastante confundida.

Sin muchos ánimos de seguir con tanta energía volátil a su alrededor lentamente se fue retirando hasta su habitación asignada, a descansar un poco aunque también tenía curiosidad, abrió la ventana para observar otra parte de la hacienda que no había visto, el lago donde se encontraban los recién llegados, todos parecían bastante inquietos gritando y nadando de un lado a otro.

Inevitablemente sonrió al tener un vago recuerdo de una escena similar y en su pecho cierta calidez junto a la tristeza y el dolor se hicieron presentes.

Resignada se dejó caer en la cama no sabía nada de ONU aún y eso le preocupaba bastante, de momento no podía hacer mucho estaba recuperando energía por lo cual también volver a salir del territorio era una pésima idea.

-Que esté bien porfavor...

Al abrir los ojos un nuevo día había comenzado, había bastante silencio a diferencia de la noche, algo curiosa decidió salir a ver el motivo solo para encontrar a todos los recién llegados totalmente dormidos por todos lados.

-Hey Tenochtitlan

Los susurros de una voz familiar pronto llamaron su atención siendo CDMX quien intentaba hacerle señas desde la puerta principal del resinto con paciencia y cuidado la de cabellos negros esquivo y salto a los obstáculos durmientes en su camino.

-Buenos días Dulzura ¿Dormiste bien?- cuestionó la capital actual una vez cerró la puerta tras de Tita.

-S-si pude dormir bastante ¿Ellos no te despertaron?

-Nah, estoy acostumbrado además me dormí tarde así que caí rendido - Explicó desinteresado mientras comenzaba a caminar sin rumbo aparentemente.

-Entiendo... Hum CDMX, Tú te enteras de todo ¿Verdad?

-Por supuesto, no hay chisme del que no me enteré además soy la capital de uno de los countrys más apreciados en el mundo, todos confían en mí al momento de hablar o bueno el alcohol en ellos- Contó orgulloso mientras sonreía confiado.

-Capital... ¡Cierto! ¿Crees que puedas averiguar dónde está ONU? Nos separamos hace un tiempo y no se nada de él- pidió esperanzada aún pensando al respecto.

-Por supuesto que puedo averiguarlo pero... Toda información tiene un costo, sobre todo si se trata de una de las organizaciones más importante del mundo así que ese es más elevado - reveló tranquilamente.

-Oh... suena lógico pero no tengo nada que pueda darte- Soltó Tita desconcertada, y angustiada sobre el posible pago.

-CDMX, solo hazlo no es como si no te diera muchas cosas durante todo el año- irrumpió Mex pasando sus manos por parte de su rostro y cabello.

-¿Qué? per...

-Por favor, una vez que Tita esté acostumbrada y estable podrán arreglarse bien - Insisto despeinando a un disgustado CDMX

-hmm, bien veré que puedo averiguar

-Muchas gracias CDMX te prometo que si necesitas algo haré lo posible por ayudarte y si no te lo pagare cuando pueda- Exclamo la de cabellos negros abrazando al mencionado mientras sonreia ampliamente.

- Oh ya se levantaron ¿Tienen hambre? - Irrumpió puebla cargando una enorme cesta con las cosas que utilizaría para cocinar

Un nuevo mundo [Countryhumans]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora