Una bella mentira.

CAPÍTULO 10

Charlotte

-¿Te gusta? - inquirió nervioso.

-Sí.

El lugar es increíble, hay máquinas para jugar, un escenario con karaoke, y además hay un espacio con una mesa redonda y una rosa en medio de esta. No me lo puedo creer que Chase haya preparado todo esto, es decir, ¿cómo ha conseguido traer las máquinas de juegos?

-No me gusta verte triste, y he decidido hacer esto – señala todo.

-Está chulísimo, muchas gracias, de verdad – voy hacia él y lo abrazo, muy fuerte, creo que lo estoy asfixiando.

Primero, elegimos jugar a las maquinitas, luego hicimos un reto de baile, más tarde nos sentamos un rato, estábamos muy cansado de bailar, y ahora, Chase va a cantar.

-How many times do I have to tell you
Even when you're crying you're beautiful too?
The world is beating you down, I'm around through every mood
You're my downfall, you're my muse
My worst distraction, my rhythm and blues
I can't stop singing, it's ringing in my head for you.

Cuando termina, me coge de la mano y me sube al escenario, vamos a cantar juntos Perfect de Edd Sheeran.

-Baby, I'm dancing in the dark, with you between my arms –canto - Barefoot on the grass, listening to our favorite song.

-When I saw you in that dress, looking so beautiful
I don't deserve this, darling, you look perfect tonight – termina él.

Le gustas.

¿Qué dices conciencia?

Le gustas.

No es verdad, no me mientas.

Pues claro que le gustas.

¿Cómo puedes saberlo?

Por la forma en la que te mira.

¿Y como me mira?

Como si fueses lo más preciado que tiene.

...

-¿Te encuentras bien? - escucho que me pregunta al ver que no reacciono. Me he quedado parada, metida en mis pensamientos.

-Sí, perdón, ¿qué me decías?

-¿Te apetece cenar ya? - pregunta observándome otra vez comprobando que sí estoy bien. Yo asiento con la cabeza lentamente.

Retira la silla, me siento, y me aproxima a la mesa.

-Espero te guste lo que he preparado - dice sirviéndome spaghettis con tomate y carne –No es nada del otro mundo, pero, me recuerda a la escena de la película "La dama y el vagabundo", y me parece especial.

Lo pruebo y... están riquísimos.

-¿Están buenos? - pregunta mirándome fijamente para ver mi expresión.

-¿Lo has cocinado tú?

-Sí, ¿por qué? ¿Están malos? - habla rápidamente nervioso.

-Están buenísimos Chase.

-Lo sabía, soy todo un chef.

-Si sí, pero hace unos segundos estabas nervioso por saber si me gustaban o no - me burló de él.

-Me alegro de que te haya gustado - me sonríe y empieza a comer el también.

La cena estuvo espectacular, ahora viene el postre, Chase se levanta de la mesa y se acerca a un rincón donde se encuentra la comida.