¡Hola, feliz año!
¡Empezamos el 2022 con nuevo capítulo! Y estoy muy emocionada porque se viene algo grande jeje
Nota adicional: Toda la historia está y estará contada desde el punto de vista de Merrick, sin embargo, a partir de este punto se incluirán otros puntos esporádicamente.
Había llegado después de casi un día completo de viaje a Bruselas. Estaba a punto de sacar el teléfono celular para realizar una llamada y simplemente escuchar la voz de Merrick otra vez, pero al ver la hora, realizó el cálculo en su cabeza y pensó que quizás no sería muy prudente despertarla a la una de la mañana, así que mejor guardó el móvil en su teléfono y se dirigió al local de renta de autos.
Se ocupó muy rápido, ocupándose enseguida con el ajetreo de la apertura de la galería, desde ver el lugar y asegurarse de que estaba en las condiciones para la pronta inauguración. También se encontraba bajo otro nombre, gracias a la ayuda de una firma de abogados alemanes que discretamente los han representado por un par de siglos. Pero era la primera que él decidió administrar completamente, desde mostrar y vender sus propios trabajos a curadurías personales. Aquello lo mantenía completamente ocupado y levemente emocionado. Disfrutaba incluso de hablar en un pulido francés y de vez en cuando en alemán con algunos proveedores.
Llegó al pequeño, pero acomodado departamento en el centro de la ciudad y se apresuró al refrigerador. Solo bastaba una llamada para que los abogados preparan una dotación de bolsas de sangre. No provenían del mercado negro, sino de algunos hospitales con sangre pronta a desechar, hospitales pequeños o grupos sanguíneos más comunes. El bufete se encargaba de todo y no hacía preguntas. Claro, con los millonarios cheques que recibían era más que suficiente para que hicieran el trabajo.
El aroma golpeó sus fosas nasales y su cerebro tembló gracias al estímulo, pero cuando el sabor llegó a la punta de su lengua, el estímulo disminuyó un poco. No era lo mismo a beber directamente de la vena, por más que tratara de calentar la sangre a la misma temperatura. Sabía ligeramente a plástico debido a la bolsa contenedora.
A veces pensaba en simplemente salir y beber de algún humano, pues siempre estaba presente el ansia del poder, del placer que solo la sangre fresca provocaba. Sabía que no sentiría algún tipo de culpa si lo hacía, sin embargo, algo dentro de él le decía que no era correcto. ¿Merrick lo vería diferente si supiera que se alimentó de un inocente? No quería ni imaginárselo.
La manera en la que sus hermosos ojos verdes brillaban cuando le dedicaba una mirada solo para él, cuando le sonreía y cuando sus manos recorrían su piel, eso era mucho mejor que la sangre. Saberse amado era su verdadera ansia.
Después de haberse alimentado, destapó una botella de whiskey y se sirvió en un vaso para luego salir hacia la pequeña terraza, donde un cielo estrellado lo acompañaba. Dejó que el sabor del licor remplazara al de la sangre y tomó su teléfono celular. Había visto los mensajes que Merrick le había mandado, pero prefería escuchar su voz, así que decidió marcar a sabiendas que al ser casi las cinco de la tarde en Northanger, era más conveniente realizar la llamada. Solo que una voz pregrabada le dejó saber que no podía realizar llamadas de un continente a otro.
ESTÁS LEYENDO
Mayheim - Transfusión parte III
FantasiaEs momento de encontrar su camino. Al menos eso es lo que Merrick piensa, así que tendrá que vencer todos sus miedos y descubrir que es lo que quiere en verdad; si se rendirá a la oscuridad o huirá de ella. Pero, ¿podrá hacerlo mientras que todo a...