Único

Especial Navidad

Antes de empezar quiero aclarar que este especial debería pertenecer a un capítulo donde todos —aún no habían nacido Mady y Alec— están reunidos para celebrar Navidad.

•••

—¡CHICOS! —grita Irina, entrando por la puerta de mi apartamento.

—¿Qué se te ha ocurrido mente prodigio? —pregunta Aaron, que estaba leyendo un libro de mi estantería.

—¡FELIZ NAVIDAD! —grita, emocionada.

—Ostia es verdad que hoy es Navidad. —dice Daniel, mirando el techo.

—Me lo veía venir —nos mira a todos con mala cara—. Así que Tara y yo hemos ido a comprar todo.

—¿Tara? —frunzo las cejas—. ¿Mi hermana?

—¿Cuántas Taras conoces? —pregunta mi hermana, entrando por la puerta.

—Solo una y me avergüenzo de conocerla. —pongo una mueca de desagrado.

—Yo si que me avergüenzo de que nacieras. —me mira mal.

—¿Qué habéis comprado? —pregunta Hugo.

—Comida.

—Hasta ahí llego, gracias por tu aportación Irina.

—De nada. —sonríe.

Tara suspira, poniendo las bolsas en la mesa y todos nos acercamos.

—He comprado-

—Hemos. —la corrige Irina y la mira con mala cara.

—Hemos comprado con mi dinero —frunce las cejas e Irina asiente feliz con la cabeza—, para antes de cenar, o sea, para hacer la liga.

—La cena. —saca Irina la otra parte.

—¿Y esa bolsa? —pregunto, señalando la última que quedaba.

—Esta es... —la agarra y me la pasa—... averígualo tú.

Agarro la bolsa sin mucha confianza y miro adentro. Me pongo roja al ver lo que hay.

—Creo que esto es para ti. —se la paso a Aaron, sin mirarlo.

—¿Qué hay? —pregunta, agarrándola y mirando dentro.

—Hemos pensado que al igual vosotros...

—Madre mía. —me pongo más roja.

—¡Solo son condones! —gritan Aaron y Daniel a la vez, que estaban sacándolos.

Me fui a la cocina a preparar alguna comida. Estaba acalorada.

—Pequeñaja. —escucho detrás mía.

—Deja de llamarme así. —lo miro mal.

—Es inevitable no hacerlo. —se ríe.

—¿Qué quieres? —pregunto, mirándolo mal.