Narra Alonso:
Mierda. Esto no me puede estar me pasando a mi, ¿por qué?
¿Por qué, _____(tn)? ¿Por qué no dejaste que Freddy te llevara? ¿Por qué?
-¿Qué paso? -pregunto Alfredo levantándose de la cama.
-Secuestraron a _______-respondí.
-¡¿Qué?! Espera.. ¿A dónde vas? -frunció el ceño.
-Voy a buscarla, necesito tenerla conmigo Alfredo, me siento tan angustiado -lamí mis labios.
-Te acompaño -dijo mientras se ponía unos jeans, una camiseta, una chaqueta de cuero y unos vans.
-Gracias, amigo -lo abrace.
-Recuerda lo que te dije, siempre voy a estar, en las buenas y en las malas -sonrió.
Bajamos las escaleras sin hacer ruido, Alfredo tomo las llaves de su carro y las de la casa y salimos de esta. Él encendió el auto y empezamos a dar
vueltas, vueltas y vueltas. Cada segundo que pasaba me sentía peor, quería encontrarla y decirle que todo estará bien. Pero no es así.-Llévame a la casa de Freddy por favor -pedí.
-Okay-suspiro- ¿Quieres ir afuera de la casa, verdad?
-Exacto, de ahí recorremos todas las calles -murmure.
Después de unos minutos llegamos afuera de la casa de Freddy, tenía unas ganas inmensas de golpearlo por dejar que _______ se fuera sola, pero lo menos que necesito ahora es pelear. Las luces del auto alumbraban las calles totalmente vacías, no había rastro de ella, tampoco alguna pista y ella me hacia tanta falta.
-Métete por esta calle -señale a mi derecha.
-Es peligrosa -la miro.
-Alfredo-lo mire- Tenemos que encontrarla, no pienso irme a casa hasta saber que ella a salvo.
-Esta bien.
La calle por la que entramos estaba totalmente desierta, esto de andar buscándola en auto me estaba hartando.
-Para -él me miro con el ceño fruncido.
-¿Qué paso? -paro el auto.
-Me voy a bajar, siento que así no vamos a conseguir nada.- me desabroche el cinturón.
-Alonso, estamos poniendo nuestras vidas en riesgo.
-Daría mi vida por ella, la amo, hermano. La amo demasiado, odio saber que esta desaparecida, odio saber que no estoy con ella para protegerla. Odio esto.
-Entonces, ¿qué esperamos? -abrió la puerta del auto. Abrí la puerta del auto y luego la cerré, Alfredo apretó un botón que tenía en el llavero y el auto había quedado con seguro.
-¿Por dónde empezamos? -pregunte.
-Esto va a ser difícil, porque no sabemos nada, así que hay que tener paciencia y revisar cada esquina.
Paso más o menos media hora y aún no la encontrábamos, caminamos, observamos y comprobamos cada esquina para verificar si es que estaba.
Pero no había rastro de ella.-Tengo una idea -dijo Alfredo. - ¿Qué planeas? -gruñí frustrado.
-Llama a _______, quizás te conteste o algo -se encogió de hombros.
-Mierda -susurre- No se me había ocurrido.
Saque mi iPhone y busque en la agenda de contactos "Princesa" y ahí aparecía ella con una sonrisa en los labios, la extrañaba tanto. Marque. Uno. Dos... Un celular empezó a sonar a unos metros de nosotros. Corrí hasta que escuchaba el celular sonar muy cerca. Mire mis pies y ahí se encontraba el celular de _______ esto no podía ser peor. ¿Cómo la voy a encontrar ahora?