Si le preguntaran a Shigaraki ¿cuál era la relación que mantenía con Dabi?, él simplemente respondería que ninguna y que nunca habría una más allá de una extraña amistad.
También le importaba un carajo con quién se metiera.
Pero por un demonio que estaba apunto de desintegrar al maldito pajarraco que tiene como novio.
El niño tenía que estar con él, porque es el líder de la liga, no con aquel par, el niño debería estarse riendo con él, no con ellos.
Y es que después del desayuno, decidieron ir al parque de diversiones, ¿cómo carajo la gente no se daba cuenta de quién realmente era?, ¡MALDICIÓN QUE NO HABIA MUCHAS PERSONAS CON ALAS ROJAS!, maldita gente ciega.
Había visto bastantes veces en la televisión cómo se le acercaban porque lo reconocían, ¡¿Y AHORA?!
Sólo observaba "tranquilamente", como el bebé ¡QUE DEBERÍA ESTAR CON ÉL!, era elevado unos cuantos metros más alto que ellos, gracias a las malditas alas del maldito pajarraco, cuando bajaba, él soltaba una carcajada de lo más infantil e inocente que haya escuchado en toda su miserable vida, maldición, esas carcajadas debía provocarlas él, no el estúpido novio de su estúpido aliado.
– Tsk – volteó su mirada a otra parte.
– ¿Celos? – preguntó la rubia abrazándolo por los hombros.
Tomura sólo la volteó a ver con cara de interrogación y asco, más no la alejó.
– No sé de qué carajo hablas, pero cállate – dio la vuelta y empezó a caminar hacia otro lugar, lejos de la pareja.
– Que estás celoso, pero no sé de quién, ¿sientes celos porque Dabi está con su novio o porque el guapo está con tu socia? – preguntó aún sin soltarlo – ¿o estás celoso de que Hawks esté con los dos?
Tomura Shigaraki se preparaba para cometer un crimen de odio.
– Mira y escucha bien, niña estúpida – dijo finalmente rompiendo el abrazo y acercándose hasta quedar bastante cerca de la cara de la chica – NO tengo celos, no me importa lo que hagan ellos, pero si algo le llega a pasar a la bola, yo no me voy a responsabilizar cuando un grupo de héroes venga a rescatarlo y no esté.
Se alejó de toda la liga dando fuertes pisadas, todo esto bajo la mirada del pelinegro, no sabía de lo que hablaban, pero ver a Toga abrazar a Shigaraki y que éste no la haya alejado y luego ver qué estaban a escasos centímetros, casi apunto de besarse, le dejó un muy mal sabor de boca.
¡NO LO MALENTIENDAN!, él ama con toda su vida a su hermoso novio, pero desde que su hermanito estaba con ellos, empezó a ver una faceta de su líder que no mostraba ni con un perro y un sentimiento cálido se formó en su pecho.
Es que lo trataba realmente bien y se preocupaba aunque lo negara, y todos en la liga hacían eso, pero que Shigaraki lo hiciera, era como un cuento de hadas hecho realidad.
También se sentía bastante relajado y tranquilo viendo cómo Hawks consentía en demasía a su hermano, maldito suertudo, cómo deseaba también ser un jodido bebé.
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Volví :D
Los extrañé ಥ‿ಥ
