¿Ese es Shoto?

3

Midoriya y los chicos habían llegado a los dormitorios de la UA, evitando encontrarse con sus compañeros y que estos viesen al niño.
Iida había buscado a su profesor desde que llegaron, pero no se hallaba por ninguna parte, pensó que probablemente él salió así que, lo único que podían hacer era esperar a que llegara.

Ya había anochecido, cuando por fin llegó el profesor, Midoriya le pidió que lo acompañará con Uraraka, cuando entraron, Aisawa no entendía porque estaban tan nerviosos sus alumnos, hasta que los sollozos de un bebé llamaron su atención.

— ¿Qué es esto?— preguntó fastidiado.

— E-es T-todoroki — responde la chica extendiéndole al bebé en la cara.
Por un momento pensó que era una broma, una de muy mal gusto, hasta que observó bien al pequeño en manos de Ochaco.

– ¡¿QUÉ LE HICIERON A MI RETOÑO?!— preguntó arrebatándoselo a su alumna — ¡¿NO PUEDEN SALIR DE COMPRAS COMO SIMPLES ADOLESCENTES?! —gritaba mientras acercaba al bebé a su pecho — ¿Cómo fue que pasó?— preguntó al fin un poco más calmado.

Midoriya comenzó a contar cómo habían sucedido las cosas y cuando este terminó de hablar se podía ver a un Shoto cabeceando de sueño.

— Bueno, voy a comentar esto con el director y la policía, para investigar al sujeto y cuánto es que dura el efecto del quirk, por lo tanto, mañana alguno de ustedes tendrá que ir a comprarle ropa ya que por obvias razones no podrá usar la suya. Vamos a manejar esto con discreción, así que eviten que sus compañeros lo vean— determinó el mayor saliendo.

— Profesor— lo llamó Tenya — ¿Dónde va a dormir?

— Con Uraraka, se nota que está cómodo con ella — los chicos lo miraron como si estuviera hablando en otro idioma — Es un niño, no va a hacer nada, está chiquito— y con eso abandonó la habitación de la castaña.

— Supongo que mañana Midoriya y yo tendremos que ir por la ropa— menciona el jóven de anteojos mirando a Shoto.

Izuku y Ochaco asintieron y los chicos salieron de la habitación de su amiga dejándola con el niño.

— Bien Shobebé, a mimir — le susurró acomodándolo en la cama, para acto seguido hacer lo mismo y quedarse dormida.

A la mañana siguiente, Ochaco se despertó buscando, aún con los ojos cerrados, el cuerpo de su pequeño amigo en la cama y al no sentirlo esta abrió los ojos a más no poder.

— ¿Sho?, ¿Shobebé?, SHOOOOTOOOO — gritaba buscándolo, sin obtener respuesta y fue ahí cuando se dió cuenta de que la puerta estaba abierta, ¿Había sido el niño?, definitivamente no, no alcanzaba la perilla, fue uno de los dos despistados que tiene como amigos al momento de retirarse a sus respectivos cuartos.

Salió lo más rápido que pudo de su habitación, por la hora que era, estaba segura de que sus compañeros ya estaban desayunando, lo que la tensó, pues se suponía que no debían enterarse del estado de Todoroki.

Al bajar al comedor, efectivamente estaban todos desayunando, hasta Bakugo, que casi nunca lo hacía.

— Debe ser una broma— pensó

— Uraraka, ¿se te pegaron las cobijas? — preguntó Kirishima con una sonrisa, mientras ella se sentaba a un lado de sus amigos, buscando con la mirada una pequeña cabecita mitad albina.

— No es la única, Todoroki tampoco ha bajado — menciona Yaoyorozu, viendo a los tres chicos — ¿Saben por qué Todoroki no ha bajado?

Los chicos se tensaron al escuchar la pregunta.

— Ahh, n-no lo sé, tal vez salió temprano, jeje — responde Izuku rascándose la nuca.

La pelinegra no dijo nada más.

— Tenemos un problema — susurra Ochaco para sus amigos, quienes la voltearon a ver para que se explicara.
— No sé qué bobo dejó mi puerta abierta y Shobebé se salió — dijo sin más, mirándolos.

Deku se sonrojó, pues el había sido el bobo que dejó la puerta abierta.

— ¿Y en dónde está? — preguntó Iida viendo a su amiga

— ¡AQUÍ DESAYUNANDO CON NOSOTROS, ¿NO VES?, NO SÉ DÓNDE ESTÁ, TE DIJE QUE SALIÓ DE MI CUARTO! —gritó exasperada, ganándose la mirada de todos los alumnos del grupo 1A, pues nunca habían visto que su compañera de comportase así.

— ¿Se te perdió algo? — preguntó Denki

— JAJA no, no es nada, jeje — le responde la muchacha más que nerviosa.

— ¿Saben si Todoroki vendrá a comer? — volvió a preguntar Yaoyorozu con un leve sonrojo.

— No, no nos dijo nada, tal vez pase toda la tarde con su mamá — mintió Deku, a lo que Momo asintió.

Después de eso, todo siguió normal, hasta que...

— ¡¡SHOTO!!