Fuego y Agua

Capitulo 3

 La compañía de que acompañaba a Darius y a Draven llevaba ya un buen tiempo en su marcha desde que habían salido de la capital en su viaje hacia el bastión de la noche, la hueste iba en una formación perfecta con los dos hermanos a la cabeza de la misma, habían pasado un par de días y el viaje era tranquilo sin ningún problema para todos, cosa que los aburría. A los Noxianos se les entrenaba para la guerra y un viaje tranquilo sin ningún ataque sorpresa o una pelea por el camino los angustiaba. Pero nadie podía decir nada o hacer algo por cuenta propia, puesto que el castigo era severo y absolutamente nadie quería enfrentarlo. 

 El día seguía su curso, y la compañía seguía su camino atravesando valles y colinas. Entonces llego el medio día todos levantaron un pequeño campamento en un pequeño valle para almorzar y descansar para recuperar fuerzas.

- ¿No se por que seguimos aquí? - dijo Draven sentándose en el suelo al lado de su hermano.

- Ya sabes por que estas aquí, así que no quiero seguir escuchando tus quejas - dijo Darius -, además tu mismo dijiste que unos días de descanso no te vendrían mal.

- Lo se - dijo Draven -, pero no pensé que el viaje fuera tan aburrido. Ahora solo quiero volver a la arena para que mis hachas prueben un poco de sangre.

- Ah, di lo que quieras, pero sabes que tenemos que encontrar a esa traidora.

- ¿Enserio vas a seguir con eso? - dijo Draven acostándose en el la tierra- déjame decirte que todos aquí saben perfectamente que Riven esta en esa region en la cual se oculto.

 Darius no le respondió a su hermano y siguió comiendo su almuerzo junto con su hermano. Cuando la cuadrilla acabo de comer y descansar, levantaron el pequeño campamento que armaron y continuaron con su marcha hacia el norte.

 Todos volvieron a la formación con la cual habían partido y dejaron el valle para adentrarse en el bosque, rodeado de arboles de roble y pino tan grandes que incluso tapaban el cielo dejando un pasadizo casi oscuro y dejando ver algunos rayos de sol en el.

***

 Después de un día de viaje la compañía que acompañaba a Darius y Draven comenzaron a estar cada vez mas cerca de su destino viendo a lo lejos las montañas nevadas y Frías del Freljord. Todos iban a caminando y la formación por primera vez fue interrumpida pero eso no le importó a nadie por estar cerca de su destino. La compañía iba conversando tranquilamente entre ellos con el fin de apaciguar el aburrimiento, cosa que no molesto a muchos, pero a Darius no le gusto demasiado, no porque sus hombres rompieron la formación sino por que Draven no paraba de hablar de si mismo. 

-  Entonces su cabeza voló por todo el cielo y cayo justo en el asiento en donde se encontraba su esposa.

- Ya lo sabemos Draven - dijo Darius molesto por las palabras de su hermano  -. Nos has contado la misma historia mas de mil veces.

- Uy lo siento señor serio - dijo Draven burlándose de su hermano -, perdóname por intentar ponerle algo de entretenimiento al viaje. Cuenta un historia tu haber si lo haces mejor

- Bueno - dijo Darius con una sonrisa burlona en su rostro - contare una historia de como el gran ejecutor termino atado por cinco prisioneros que se escaparon en su cara....

- Bueno bueno ya mucha charla por hoy no lo crees - interrumpió Draven  a su hermano.

 Entonces el silencio reino nuevamente en la compañía de noxiana y continuaron su marcha adentrándose cada vez mas en el bosque.

 ***

 Pasado buena parte del día mas adentrada en la tarde la compañía comenzó a vislumbrar las montañas nevadas que les avisaba que se encontraban cerca del bastión de la noche. Entonces Darius detuvo la marcha y se dirijo a Draven.