Hola mis hermosuras.
Después de muchos intentos, correcciones de edición y mucha dedicación les traemos nuestra mas grande apuesta, los invitamos a que sigan con nosotros esta historia, vamos a estar muy pendientes de sus comentarios y dudas.
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La...
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Abro los ojos y veo un hermoso atardecer, este lugar hace que mi alma se llene de paz, hay muchos animales a lo lejos escucho el canto de las aves (¡Pio, pio! ¡Pio, pio!), el parpeo del pato (¡Cuaa, cuaa!), el aullido del lobo (¡Auú, auú!), el balido de la oveja (¡Beee, beeee!), el croar de la rana (¡Croac, croac!), el chirrido del grillo (¡Cri, cri! ¡Cri, cri!), el ruido del agua corriendo, el aroma de este sitio es indescriptible es algo parecido a una dulzura refinada.
A lo lejos veo una hermosa casa, es pequeña, pero acogedora, salen por sus ventanales una luz muy tenue parece iluminada por velas, veo un sendero desde donde estoy hacia la casa, mis pies se mueven solos impulsados por un deseo de conocer más de este lugar, podría jurar que me es familiar, que lo he vito antes, pero sé que es imposible.
Ya estoy en el porche y veo por su ventana que la chimenea está encendida, los animales se detienen en el sitio donde están mirando hacia mí, lo han hecho en todo el camino que recorrí, es difícil de entender el porqué estos animales no huyen asustados de mí, pero me es mas extraño que no les tenga yo miedo.
Doy un último vistazo a los animales y abro la puerta delante mi, dejándome muda, pues es todavía más hermosa por dentro, noto como hay una sala decorada muy sencillamente, pero sus colores son muy hogareños, todo está limpio y huele como la naturaleza de afuera, siento cierto aroma familiar, es el perfume de un hombre, pero mis pensamientos están nublados, solo sigo caminando hasta una mesa de centro que está en la sala y veo allí esta mi familia, hay fotos de mis abuelos, hay una foto hermosa donde mi papa está abrazando con devoción a mi mamá; también hay una foto mía de cuando era una bebe, pero dirijo mi mirada nuevamente a la foto donde están mis padres y un sentimiento de tristeza invade mi corazón.
Apenas y noto que ya mis lágrimas recorren mi rostro sin que pueda detenerlas, siento como unos enormes brazos me abrazan por detrás y mi llanto se vuelve todavía más fuerte, quisiera entender que me pasa y que es este lugar, pero por ahora me permito disfrutar del abrazo más maravilloso de mi corta vida.
No sé cuánto tiempo ha pasado, pero poco a poco me logro controlar y tomar las suficientes fuerzas para girarme.
De mi boca sale un grito que controlo colocándome las manos en mi boca, es mi padre, su hermosa sonrisa vuelve a estar enfrente de mí, sus ojos iguales a los míos me llenan de paz - ¡PAPÁ! – grito y él profundiza más su sonrisa, me toma en sus brazos y me levanta permitiéndome colocar mis brazos alrededor de su cuello.
Mi padre llena mi cabeza de sus besos, mi llanto aparece nuevamente, quisiera poder controlarme y decirle cuanto lo amo, que debemos regresar con mamá y los abuelos, que lo extrañamos mucho, además quisiera preguntarle que es este lugar, como llego el aquí o como llegue yo aquí. Pero en vez de eso de mi boca no sale ninguna palabra solo llanto y llanto.
Él me deposita en el suelo y se arrodilla para quedar a mi altura, con sus manos toma mi rostro e inicia a limpiar mis lágrimas una por una, cuando ya no recorre ninguna más mi rostro me da un ligero y tierno beso en mis ojos.
-Hija mía no sabes cuanto te he extrañado- dice él con la mayor tranquilidad -tienes que estar tranquila por favor, permíteme hablar y explicarte todo cuanto debes saber, lamentablemente no fui lo suficientemente fuerte para protegerlos más tiempo- su rostro se llena de tristeza y reprime una lágrima que quería salir de sus ojos- me toma nuevamente en sus brazos y camina conmigo hacia lo que creo que es la cocina. Y me sienta en un taburete.
-Me imagino que tienes abre, te estaba esperando he hice tu postre favorito- va a una pequeña nevera y saca un recipiente de vidrio y con un cuchillo parte una porción para mí que coloca en un plato pequeño y me lo entrega.
-Leche asada- logro decir y una sonrisa maravillosa vuelve a hacer presencia en su rostro.
-Come por favor-
Mi boca ya tiene necesidad de colocar un bocado de esa delicia en mi boca, mi papá me ha dejado nunca cuchara pequeñita a mi lado, la cual tomo e inicio a comer, no es nada menos de lo que esperaba, como siempre esta el toque perfecto de vainilla que mi papa sabe que adoro.
-Hija hay tantas cosas que debí de haberte enseñado, no debí de permitir que el miedo a perderte me impidiera educarte como debería de ser, y menos esconderte lo que eres en realidad, pero pensé que, si no destacabas, o si no sobresalías la gente no te iban a descubrir, pero fui muy tonto, el amor por tu madre y por ti me cegó y pensé que iba a estar a su lado para protegerlas toda la vida.
No entiendo que quiere decir, ni tampoco entiendo que es lo que me oculto o de que me protegía, además porque dice que ya no estar con nosotros, pero nuevamente mi voz me traiciona y no logro decir ni una sola palabra.
-Discúlpame de nuevo hija, pero quiero que te grabes en tu cabeza lo que te voy a decir, tú eres muy fuerte, más fuerte de lo que puedes siquiera llegar a imaginar- mi cara tiene que ser un poema de confusión- quisiera que fueras más grande para que me entendieras mejor- dice frustrado.
_Hola hermosuras, bueno aquí tenemos un capítulo mas de esta bella historia, la verdad llore escribiendo y espero haber logrado plasmar todos esos sentimientos aquí para ustedes, desde la distancia como siempre un fuerte abrazo y sigan cuidándose mucho_
*NOTA: Esta autora esta mas que agradecida con ustedes por todo su apoyo, les agradezco inmensamente; además lo prometido es deuda y aquí va la frase del día de hoy*
Albert Einstein
"Dar el ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera"
