Una nueva cazadora 2

Capítulo 2

-           ¿Qué hizo qué?.-

-           Lo que has oído. Chris y yo teníamos una relación, pero llegó esa entrometida cazafortunas y se interpuso entre nosotros con sus malas artes. –

-           Wow, vaya. No parecía que fuera así.-

-           Créeme, ella no es buena. No quiere a Chris como yo.-

-           Lo que dices... no puedo permitir que se aproveche de él.-

-           No, no puedes.-

-           Hablaré con Chris, intentaré convencerlo para que se aleje de ella.-

Olivia sonrió satisfecha, su última carta estaba sobre la mesa, y no la importaba utilizarla.

Briana acorraló a Chris, cuando estuvo segura de que la víbora cazafortunas no estaba cerca, cosa difícil, porque parecía que le había comido el cerebro. Su primo aprovechaba todo su tiempo libre para estar juntos.

Le costó empezar la conversación, pero no podía permitir que le hicieran daño. Cuando le expuso con claridad el objetivo de Elsa, se sorprendió por el silencio de Chris.

-           ¿No vas a decir nada?. ¿No estás enfadado?.-

-           Creo que te han informado mal.-

-           No lo creo. Olivia me contó todo.-

-           Olivia es una embustera. Yo nunca he estado en una relación, ni nada parecido con ella-

-           Olivia no me mentiría en algo así.-

-           ¿La crees a ella más que a mí?.-

-           Yo...-

-           No Bree, ella hizo algo... algo que incluso a mi me da vergüenza, y créeme, no hay muchas cosas que me avergüencen.-

-           ¿De qué estás hablando?.-

-           Digamos que no es tan inocente como quiere parecer.-

-           Pero ella...-

-           Ella no estaba dispuesta a detenerse por conseguir su objetivo, y ese era yo. Pedí ayuda a Elsa, porque me sentía intimidado por Olivia. No me siento orgulloso de ello, pero así era. Esa chica pierde los papeles de tal manera que me asusta. Por fortuna, Elsa era la persona con la que estaba intentando tener una relación. Le expuse la situación, y ella me sugirió la mejor forma de pararle los pies a tu amiga. Y estoy contento de que lo hiciera. Ahora tengo a la chica que quiero en mi vida, y esa mala pécora sabe que  no tiene nada que hacer contra mi chica.-

Chris tenía una tonta sonrisa en su cara, y la mirada perdida, como si rememorara una imagen en su cabeza.

-           Entonces...-

-           Olivia intenta utilizarte, Bree. No es una auténtica amiga.-

-           Yo..., no sé qué decir. He estado echado pestes sobre Elsa todo este tiempo, y realmente, ella no es la culpable de nada. Estoy segura de que oirá mis comentarios por boca de muchos.-

-           Creo que le debes una disculpa.-

-           Lo sé.-

-           ¿Quieres hacerlo ahora? He quedado en recogerla en unos minutos.-

-           ¿Estás seguro?.-

-           Si de algo lo estoy, es que Elsa es de las que escucha antes de juzgar a nadie. Si te disculpas con ella antes de que la mierda empiece a golpear, será lo mejor para ti.-

Como Chris le dijo, Elsa escuchó su historia sin interrumpirla. Ella comprendió su situación, y aceptó sus disculpas sinceras. Cuando se despidió de ella, tenía la sensación de que no solo acababa de conocer a una nueva amiga, sino a una persona en la que podía apoyarse y confiar. Elsa parecía la roca a la que sostenerse cuando la tormenta se acerca.

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Briana miraba por el gran ventanal, absorta en deprimentes ideas sobre su oscuro y vacío futuro. Ni siquiera se giró hacia la puerta cuando Chris y Elsa entraron ruidosamente en el apartamento. Con un gesto, Elsa le indicó a Chris que las dejara solas, y él obedeció. Había notado la apatía de su prima pequeña, y estaba convencido, de que si había algo que se pudiera hacer para animarla, Elsa lo encontraría. Nadie mejor que una mujer sabia para entender a otra mujer.

-           Necesitas venir con nosotros. Salir a divertirte te ayudará.-

-           No creo que pueda.-

-           Rendirte antes de intentarlo es demasiado fácil, y no creo que seas de las que se rinden.-

Briana se giró para ver el rostro afable de Elsa, y no pudo evitar sonreír un poco. Sí, lo intentaría. Había evitado pensar en que aquella noche se celebraba la fiesta de fin de temporada del equipo de su primo, porque irremediablemente pensaba en que Jed estaría allí. Y se había cansado de ser invisible. Y ahora, sin Olivia a su lado para animarla, no se sentía con fuerzas para ello.

Mientras entraban en el gran salón de festejos, sintió la protectora mirada de Elsa sobre ella. ¿Tan evidente era su abatimiento?. En fin, compuso su mejor sonrisa y caminó hacia el centro de la fiesta. Aquella fiesta no la disfrutaría, pero no se la arruinaría a su primo y su novia. Cuando recorrió con la mirada el local, sus ojos se quedaron fijos en un grupo. Frente a ella, Jed reía las palabras susurradas a su oído por una mujer. Pero cuando ella giró su rostro hacia Briana, sintió un cuchillo clavándose en sus entrañas, era Olivia. Su mano estaba sujeta al bíceps de Jed, y él se sentía tan cómodo como su amiga. Las piernas de Briana tomaron la decisión por ella, sacándola de allí a toda la velocidad que sus altos tacones la permitían.