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- Esa poción que tienes en la mano sirve para ocultar lo que nos hace anormales

Me quejaría con él por haberme interrumpido, pero la información que me había soltado era genial y muy útil, con ese líquido raro podía ocultar las alas, me emocione demasiado, estaba a punto de negociar con él, pero me lo quito y mi sonrisa se vino abajo.

- Pero...

- No te lo daré, aun no

Iba a reprochar, pero en cuanto dijo el "aun no", mi sonrisa se ensancho.

- Antes que nada, el efecto de la poción dura un día entero, solo deberás tomar un pequeño trago, al inicio te dará mareo unos segundos después te sentirás más ligera, pero si te pasas de la cantidad que te he dicho puede volverse permanente - ¿permanente? ¡Genial!, supongo que mi cara de felicidad le molesto – quita tu estúpida sonrisa que hablo enserio, después de eso los mareos serán más constantes y te punzara la cabeza, no es nada agradable – su semblante serio me confirmo que era muy feo

- ¿Te ha pasado?, ¿Hay cura? – solté cautelosamente

- Le paso a varios compañeros hace unos años, cayeron en cama y no, aun no

Me extendió su mano con el frasco, lo tome con mucho cuidado, como si fuera lo más valioso que había encontrado.

- ¿Pero...Porque me lo das? – hace unos instantes me dama manotazos para que no tocara y ahora me daba uno de sus preciados frasquitos

- También estuve en tu lugar, llega un punto en el que necesitas descansar y te emociona el solo pensar en cómo te verías sin ellas, el cómo sería la vida sin eso... - su voz se fue apagando mientras me daba una sonrisa triste

Nos quedamos en silencio por unos instantes hasta que la esferita de luz parpadeo, llamando su atención, sujeto uno de los frascos que estaban a la mitad, el líquido era amarillo. Se escucharon pasos por el pasillo, él se levantó alarmado, la voz de mi madre rompió el silencio, en un pestañeo los frascos junto con la luz flotante desaparecieron, Damián me ayudo a incorporarme, mi madre estaba al otro lado de la puerta, girando la manija, él se acercó y susurro a mi oído "bebe toda la poción por la mañana" dejo el frasco en mi mano para después meter mi mano dentro del bolso de mi pijama, mi atención se fue a la puerta por lo que no vi el momento en el que desapareció.  

- Metzin, ¿Qué haces despierta? – pregunto mi madre sacándome del pequeño shock que había tenido

- Solo jugueteaba un poco – me miro poco convencida

- Son más de las once, debes irte a dormir, mañana podrás jugar – me sujeto de los hombros y me llevo a la cama

Estoy en el baño, con el frasco en la mano pensando en lo que paso ayer, todo paso muy rápido, ando indecisa y ¿si después de tomarlo me siento mal?, saco de mi bolso el otro recipiente y lo miro, cuando me dejo este me dio indicaciones.

Bueno si lo seguía dudando jamás sabría qué es lo que sucedería, lo abrí y me lo tome de agolpe, sabia raro, era agrio. Me eche un vistazo al espejo para asegurarme de que todo esté bien y sí. Guarde el otro frasco en el bolso.

El día siguió con normalidad, los chicos, aun platicaban sobre si ya tenían pareja, seguíamos recolectando papel, ya era el último día, mañana será la fiesta.

- Hey Metzin!

Voltee en cuanto escuche mi nombre, lo raro era ver quien había llegado a sujetarme de brazo.

- Que bueno que te has detenido, no podría correr ni un segundo mas

- ¿Natasha? – juro que intente que mi voz no demostrara lo sorprendida que estaba y lo nerviosa

- Esa misma, ven quiero hablar contigo- me toma con más fuerza el brazo y me encamina ¿a dónde? No lo se

Se supone que me vería con Kinich en la cafetería y ya solo me quedaba dar la vuelta para estar con él.

- ¿Y de que querías hablar? – intente ser lo más sutil posible

- ¿Ya tienes tu vestido para mañana?

- Emm si

- Que bueno, yo ni siquiera tengo idea de cómo quiero que sea

Pasamos unos segundos eternos en silencio, caminando sin rumbo alguno.

- La verdad es que quiero ser tu amiga

Lo soltó de golpe, sin siquiera mirarme.

Ángel...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora