Only Memories -Daniel Ricciardo-

¿Propuesta de matrimonio?

Cuando Daniel e Ivy hablaron, acordaron en verse en casa de ella, pues tenía que quedarse a cuidar a su abuela después del trabajo ya que su mamá tenía que salir a hacer algunos trámites importantes. Por lo que la casa de Ivy sería el único lugar en donde los dos se podrían ver y hablar sobre el préstamo que Daniel le haría a Ivy.

Ella estaba decidida en aceptarlo pues debía tener su carro de vuelta, era esencial para poder asistir a su trabajo, llevar a su abuela a sus consultas y hacer los mandados en casa. Y teniendo eso en cuenta, el préstamo sería su salvación.

Al llegar Daniel a la casa de Ivy, ella se encontraba en la cocina preparando los medicamentos y comida para su abuela. Estaba tan concentrada que no se dió cuenta cuando su abuela dejó pasar a Daniel, eso sucedió porque él había tocado la puerta un par de veces y como la abuela de Ivy estaba cerca de la misma, le abrió al escuchar a Daniel decir que era amigo de su nieta.

La abuela de Ivy amablemente lo invitó a entrar a la casa, le dijo que se quedará en la sala en lo que ella le decía a su nieta que él había llegado a verla. Al entrar la abuela a la cocina, le dijo a Ivy que su amigo había llegado y se encontraba en la sala. Que debía salir y recibirlo, ser educada y ofrecerle una bebida.

A lo que Ivy obedeció, después de preparar las cosas de su abuela, salió a la sala para encontrar se con un Daniel bastante curioso, caminando en los alrededores de la sala.

Ivy - Perdón, no escuché cuando tocaste la puerta o hablaste.

Daniel - No te preocupes, seguro estás bastante ocupada ayudando a tu abuela.

Ivy - Solo un poco, tengo que preparar las cosas para su comida y medicamentos.

Daniel - Si puedo preguntar, ¿Qué es lo que tiene?

Ivy - Diabetes, la ha tenido por más de 30 años. Por lo que debe estar al pendiente de sus medicamentos, alimentación y actividad física. También tiene problemas de audición.

Daniel - ¡Vaya! No imaginaba que pudiera tener eso, se ve bastante bien.

Ivy - Si, lo está. Nos esforzamos para que tenga una buena calidad de vida. Yo junto a mi mamá nos encargamos de eso, aunque mi abuela está bien, siempre hay días en los que no quiere seguir con su tratamiento o comer.

Daniel - Es bueno que las tenga a ustedes para poder estar bien. Pero creo que pueden contratar a alguien que las ayude con ella.

Ivy - Si, eso lo sé. Pero eso cuesta mucho y ahora mismo no es algo con lo que podamos contar. Tu lo dices, porque es sencillo para ti hablar de pagar por ayuda.

Daniel - Si, yo sé que para mí es sencillo y es por eso que he venido a ayudarte con el préstamo, pero también quería hablar contigo sobre algo. Dijo él con nerviosismo, pues estaba a punto de hablar sobre el contrato.

Ivy - Gracias por lo del préstamo y sobre lo que quieres hablar. Podemos hacerlo, pero hay que subir a la terraza de mi casa y así hablamos mejor.

Daniel - Si, está bien. Vamos.

Ambos subieron a la pequeña terraza de la casa de Ivy, para poder hablar mejor sobre el préstamo y sobre lo que Daniel quería hablar con ella.

Ivy - Ahora que estamos aquí, ¿Qué es lo que querías decirme?

Daniel - Antes de hablarte de eso. Sobre el préstamo. ¿Si vas a aceptarlo?

Ivy - Si, lo voy a aceptar. Prometo pagarte lo antes posible.

Daniel - Sobre eso, no te preocupes. Confío en ti y no quiero que me lo devuelvas tan rápido, no te estreses por eso.

Ivy - Pero dime. ¿De qué es lo que querías hablar conmigo?

Daniel - Es sobre mi abuelo, es sobre su casa.

Ivy - ¿Él está bien? ¿Pasó algo con su casa? Dijo ella preocupada

Daniel - Lo que sucedió, es que hace unos meses él falleció. Y me dejó su casa como herencia.

Ivy - Lo siento mucho. No sabía sobre eso. ¿Quieres que te ayude con algo?

Daniel - En realidad si, sobre su herencia. Había una condición para tener esa propiedad. Dijo él, al mirarla a los ojos.

Ivy - ¿Cuál es esa condición?

Daniel - La condición es que debo estar casado con alguien. Y quería preguntarte si es que tú ¿Te quisieras casar conmigo? Dijo él esperando y deseando que ella no pensará que había enloquecido