MI DULCE SALVACIÓN © (2) (¡Completa!)✔

CAPITULO 34

Mío y para mí, siempre para mí

Laura Ciaran

Todos estábamos listos para volar de nuevo a casa, pero con un nuevo integrante más Lev.

Joey estaba tan emocionado que de verdad me contagiaba su manera de ver las cosas, estaba todo excelente entre el ruso y yo, se que estos días han sido cruciales ya que a tenido que moverse mucho para sus alianzas con más personas.

Me contó que salió muy bien la importación de armas de La Boss y que Arman que es líder de La mafia roja también está contento con la producción del dinero, admito que pensé que sería más complicado como la "prometida de Korolev" solo tengo que supervisar y me gusta me siento poderosa cuando vienen a mi y me dicen señora Koroleva.

Y más porque tengo que poner mi postura dura, pero por dentro me muero de risa, pero porque me da miedo, me da miedo hacerlo mal, más bien es risa nerviosa.

El ruso y Lucían han estado muy juntos, ahora en el avión antes de despedirnos del abuelo, mi pequeño lloro y dijo que pronto quería que fuera a casa con nosotros.

El abuelo Yakov le dio la razón y realmente yo no quería que se quedara, pero fue su decisión, el pensar que esto del fingir se volvió real no pensé que esto pasaría y cuando le cuente a Arly espero se ponga feliz aún que dentro muy dentro de mi ella ya se lo imaginaba.

Creo que todos nos lo imaginábamos.

Recargué mi cabeza con la del ruso y el puso su mano en mi muslo desnudo dando leves masajes circulares con sus pulgares, estás dos semanas aprendí usar muy bien las faldas.

Lucían estaba sentado en su regazó con la cabeza recostada en su pecho, sus pequeños ojos se cerraban, eso significa que dormirá en todo el vuelo, tenerlos así me encantaba yo solo deseaba eso, tener una familia aunque se que el ruso no quiere.

En unos días sería el cumpleaños de Axel y la propuesta de matrimonio, se de antemano que después iremos a un antro o algo así, estando allá le preguntare a Axel, necesito la información completa y el ruso me la da por pausas y la verdad es como un algoritmo que debo descifrar.

El teléfono del ruso sonó

— ¿Qué pasó?

Enarqué una ceja

— Carajo, ¿estás bien?

Levanté mi cabeza para mirarlo y este ya tenía la mandíbula tensa.

— Quiero que te lleves a la mitad de mis hombres en lo que tú recuperas a los tuyos, no te preocupes por nosotros, si bien cuídate Boss.

Colgó y cerró los ojos con fuerza.

— ¿Qué pasó?

— Atacaron a la italiana, tuvo un atentado en uno de sus antros de nuevo, uno de sus hombres la traicionó y mataron a 40 hombres que tenía a su espalda para cuidarla, ella acabó con todos lo demás que la atacaron, pero necesita volver a hacer recolección de hombres y por lo mientras le daré apoyo con el clan.

— Mierda, eso no está bien, tuvieron estas dos semanas para hacer algo, ¿Por qué ahora? — no dijo nada — me imagino que ya deben de saber de nosotros, tenemos que cuidarnos más cariño.

— Lo se joder y no quería que esto pasara — sus ojos se conectaron con los míos, estaba preocupado y tenía en sus ojos culpa negué con la cabeza porque sabía que lo que pasaba por su mente — Lo es.

— Claro que no lo es — susurré y tomé su rostro para darle un beso en sus suaves labios que el respondió lentamente.

Gemí porque mordió mi labio inferior, — Lukyan — susurré y le hice una seña de que mirara a Lucian, el sonrío un poco y su mano se subió más a mi entrepierna, — Nos verán — susurré y me mordí el labio inferior, Lev y Joey estaba en los asientos de alado.