MI DULCE SALVACIÓN © (2) (¡Completa!)✔

CAPITULO 16

Somos Tercos.

Lukyan Korolev.

Tal vez si se una buena idea en decirle a Laura, no quiero llevar a otra persona que no sea ella, y es porque siento que ella me entenderá.

Saqué mi celular y le marqué.

— Hola — descolgó.

— Necesitamos hablar ¿Puedes ya llegar? — le dije tratando de controlarme.

— Solo iré por unas cosas y ya...

— LAULAULAULAULAULAU —empezaron a gritar.

¿Qué carajos?

— Mi amor espérame — escuche a lo lejos.

¿Cómo que mi amor?

— Ya ruso, ¿Qué pasa?

No, ya no quiero nada.

— Nada. — colgué.

Que idiota soy, es obvio que mi Slatkaya tiene alguien más, que imbécil.

Termine mis pendientes, ahora resulta que el equipo de la policía está investigando un grupo de la mafia turca que esta dejando cuerpos por toda la cuidad porque el líder quieren llamar la atención de un otro clan, eso es absurdo porque las personas buenas pagan por esos imbéciles de mierda.

Esto es una jodida mierda.

No tengo cabeza para esto.

Tal vez debería ir con Mikaela, si le pago y dice que es mi novia, viajamos, mi abuelo firma eso y se acabó.

Es un pésimo plan.

No, no lo es porque ella ya sabe la mayoría de mi vida.

Si lo es, déjate de idioteces pedazo de mierda Rusa.

Si si lo es, pero no tengo a nadie más, no puede salir nada malo

Jodete pues.

Marqué al numero de Mikaela

— Hola mi amor — dijo, rodeé los ojos.

— ¿Puedes venir? — pregunté.

— Claro, voy para allá.— colgué.

Pasaron unas horas, hasta impuntual es está mujer.

La puerta se abrió.

Necesito cambiar la cerradura, no se porque carajos no le he quitado las llaves, ni siquiera sabía que tenía un duplicado, cuando vivíamos si le di un duplicado, pero se lo quité y esas se las di a Laura.

Esta loca, ¿Qué esperabas?

— ¡Mi amor! — chillo mientras se me columpiaba en mi cuello.

— Quítate.

— ¿Para que me querías?,¿Quieres que me desnude? Me hice una increíble depila... — murmuró con voz diseque seductora.

Interrumpi— No, no quiero nada de eso, no te llame para eso.

Hizo un puchero ridículo— ¿Entonces?¿Quieres que llame a mis compañías?

Ignore lo que dijo y dije serio — Necesito un favor, conoces mi historia y quería que me acompañaras a Rusia por unas cosas, tienes que fingir ser mi novia y listo, te pagare por eso.

— No, yo ya soy tu novia. — afirmó.

Solté una carcajada.

— No lo eres.