Teen Titans: Expuestos

Capítulo 36: Dentro de la Torre

Jason

Barbara y yo nos aseguramos de que nadie más pudiera volver a entrar o salir. No queríamos que nuestros aliados volvieran a estar en peligro, y no queríamos que ningún enemigo saliera otra vez. Por lo que nosotros sabíamos, todos los héroes estaban en la costa intentando ayudar a evacuar Jump City, lo que significaría que incluso si la Torre volaba en pedazos, nadie salvo nosotros dos sería herido.

-Acordamos que si sobrevivíamos a esto irías a una cita conmigo, ¿no?-Pregunté riendo mientras bajábamos el acceso al techo hacia la sala común. El cuarto de evidencia estaba en el último piso, en el sótano, por lo que tendríamos varios pisos que cruzar.

-Eh....bueno, si salimos de aquí en una sola pieza, quizá acepte-Respondió ella, ignorándome. Me reí, y ella se rio también. Yo sabía que probablemente moriría una vez más, pero no me importaba. 

La Torre estaba hecha un desastre, de eso no cabía duda. Paredes llenas de grafiti, paredes destruidas...Jason sabía que los Titanes habían hecho lo posible por arreglar las medidas de seguridad desde la mansión. Quizá eso había ayudado a reducir el número de intrusos, pero ciertamente no había impedido todo ese daño. Al menos Richard se había llevado los archivos físicos.

-¿Cómo llegaremos al cuarto de de evidencia antes de que algo peor pase allá afuera?-Preguntó Barbara mientras preparaba sus armas.

-Bueno, para tu fortuna, yo ya he robado evidencia de los Titanes antes. El acceso más rápido es un atajo oculto en el cuarto de Dick. Así era como él escondía el traje, y como yo lo encontré-Respondí mientras recordaba aquel día. Quién diría que Dick tendría el sueño tan pesado.

La habitación de Dick estaba hecha un completo desastre. Grafiti, muebles destruidos...los enemigos de los Titanes habían hecho una burla de su hogar. Cuando apenas planeábamos todo esto, pensamos que cualquier daño a la Torre sería meramente material. Para nosotros la Torre no era más que un edificio sin importancia, algo pretencioso quizá, y una cueva desastrosa llena de cajas de pizza. Para los Titanes era su hogar, su refugio de los tormentos de sus vidas anteriores.

Me prometí que si sobrevivía, yo mismo ayudaría a reconstruir todo este lugar.

El atajo era una especie de túnel vertical por el que sólo se podría bajar a rapel. Estaba escondido detrás del cuarto de evidencia, protegido por los mismos sistemas, pero oculto del resto de los Titanes cuando tenía que estarlo. 

-¿Cómo demonios descubriste este lugar?-Preguntó Barbara mientras descendíamos.

-Bueno...después de que me rechazó decidí vengarme. Mi primera intención fue asaltar el cuarto de evidencia, y entonces descubrí que una de las paredes estaba hueca. Y bueno...le tomó mucho tiempo darse cuenta de que había tomado el traje. 

-¿Por qué no me dijiste nada?-Preguntó ella mientras bajábamos. Me detuve un segundo y me encogí de hombros. 

-Porque creí que si te decía me ibas a detener.

-Lo dudo, ya comprobamos que cuando tienes un plan estúpido, yo estoy dispuesta a ayudarte. Creo que por eso es que todo se fue al carajo-Respondió ella riendo mientras abríamos la puerta al cuarto de evidencia.

-Yo no. De hecho me atrevería a decir que las cosas salieron aún mejor de lo que esperaba. 

Tanto Barbara como yo pegamos un brinco y apuntamos nuestras armas hacia el lugar del que venía la voz. Con pasos pesados y las manos alzadas, Slade nos estaba esperando. 

-Vaya, vaya, vaya. Pero si no son mis villanos preferidos; aquellos que pretenden ser héroes hasta que sus intereses están de por medio-Murmuró él con tono burlón. Cargué mi pistola nuevamente y la apunté hacia su cuello, justo donde le había disparado a Starfire.