Mi Diamante Precioso

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Toque su puerta y asome un poco mi cara

- ¿Puedo? -

Ella levanto su mirada para luego asentir

-Siempre comemos juntos- levante mi comida

-Pero has sido un imbécil los últimos días-

-Ya te pedí perdón- me senté a su lado para comer

-Tu madre me pidió que te cuidara, pero solo tenía ganas de matarte- me reí

- ¿Cuándo te mudas a tu casa? –

-No me pienso mudar de mi apartamento, no encuentro motivo para vivir en esa casa solo, así que la venderé de nuevo-

Ella negó mientras reía

- ¿Entonces yo que hago? -

-Seguiremos durmiendo y viviendo juntos- la escuche toser

-Pero si quiero tener sexo con alguien- la mire mal

-Te rentas una habitación en un motel y ya- le reste importancia

-Entonces tu igual- asentí

-No se si logré hacerlo con alguien- fui sincero

-Solo no te das la oportunidad, porque muchas mujeres lo quieres hacer contigo- levante mi ceja

- ¿Hasta tu? - recibí un golpe en mi hombro

-Dios baja tu agresividad-

-Te veo como un hermano, bueno eres mi mejor amigo así que no te veo con motivos para tener sexo- aclaro

-Yo igual-

- ¿Me perdonas? - le ofrecí de mi comida

Ella asintió para comer lo que le ofrecí.

-Dios que rico esta- señalo lo que había ordenado para mi

- ¿Cómo vas del tema? –

-Digamos que bien, tengo mis momentos en que recuerdo lo imbécil que fui, pero ya ninguna mujer me coge de pendejo-

-Bueno entonces para que seas el nuevo Alejandro hoy vienes conmigo a una fiesta y la regla es que te lleves a una mujer a la cama-

-Quizás eso no lo pueda cumplir, es difícil salir de mi área de comodidad- ella levanto sus hombros como si no le importara

Hablamos un rato hasta que terminamos nuestro almuerzo.

Luego de eso fui a mi oficina para continuar trabajando.

***

-Así- le mostré mi atuendo

-Es mejor que los otros cinco- ella estaba acostada en el sofá de la sala esperando por mi

-Entonces vámonos-

Tome las llaves de mi auto y salimos juntos

-No se como ustedes pueden andar con esas agujas- señale sus tacones

-Que bueno es verte Alejandro- me saludo la vecina que siempre pasa el chisme

-Igual- cerré la puerta para irnos

-Ahora seré el chisme del complejo – me queje cuando salimos

-Bueno al menos ya no pensaran que eres homosexual porque ni a la loca esa traías aquí- la mire mal

-Ni me la recuerdes-

Ella se subió al pasajero y coloco música.

-Necesitamos ya ir activado- me reí