Capítulo 17 - Leña al fuego.

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Me dejé caer en mi cama, finalmente los chicos habían vuelto a sus respectivos hogares.

Tres preocupaciones menos.

Tanto como Mark tiene la habilidad para manejar su poder a través de la vista, Loretto puede cambiar tus recuerdos, una habilidad única en ella. Puede alterarlos, hacerte dudar de si son reales o simplemente borrarlos.

Una locura total.

Hizo creer a las tres familias diferentes cosas, lo más creíble que podía salir de la mente de Locura.

En resumen, Luka había caído de un segundo piso cuando intentó hacer una acrobacia arriesgada para escapar de la policía que lo confundió con un asesino en serie; Athan había sido atacado por pirañas cuando perseguía a un criminal para entregarlo a la justicia y Mark había recibido una descarga eléctrica cuando un ladrón lo atacó con un cable del alumbrado.

Curiosamente todas tenían una relación con crímenes, y carecían de sentido alguno.

No esperaba visita alguna por hoy, al menos eso creí.

Di vuelta sobre mi misma en la cama y escuché unos pasos.

- ¿Quién es? - cuestioné media adormilada.

- Ya los hice pagar a ellos - abrí los ojos asustada al escuchar esa voz, conocida y una que no deseaba escuchar - Ahora es tu turno.

Tragué con dificultad y encendí la luz, si quería dañar a esta chica, la luz lo hará.

- ¿Ah sí, Olivia? - me levanté mientras ella buscaba la manera de apagar la luz - ¿Y por qué debo pagar?

- Por meterte dónde no debías.- veía como la furia emanaba de sus ojos - ¿Por qué lo dañaron a él y no a ti? ¿Eh? ¿Será que Edwin estará enamorado de ti también, zorra?

- Puedes irte y evitar peleas, Olivia.

- ¿De verdad crees que te salvaras de esta? - rió - te informo que no.- cogió mi brazo y nos teletransportó a un campo cercano a mi casa. Totalmente oscuro, solo alumbrado por la luna.- Mucho mejor.

Se acercó a mi, ¿Que daño podía hacerme esta chica? Solo era oscuridad, nada más que eso.

- Si bien hay muchos estereotipos de que la oscuridad es el lado malvado o el negro es malo, no sé si sea verdad, pero me gusta usarlo a mi favor.- tocó mi brazo y se me nubló la vista.

Sentía como si cayera a un agujero profundo y no pudiera salir, solo hundirme. Como si ella me hubiese envenenado o inyectado de su oscuridad.

- ¿Que demonios...? - intenté iluminar algo con el fuego de mis manos pero no había nada que pudiera orientarme.

Sentí un golpe en la espalda y caí al suelo. Pegué un par de patadas sin ver y solo una acertó contra ella. Me levanté apenas y ella volvió a golpearme, esta vez en el cuello, haciéndolo crujir un poco. El efecto de la oscuridad ya se estaba acabando, cuando se percató de esto y se acercó a mi para renovarlo, aproveché de quemar sus brazos con mis manos. Le di un golpe en la cara y ella se quejó, volvió a por mi hecha un furia y haciéndome caer.

Ya no me sentía débil, sino muy enojada, molesta y degradada. Oscuridad me estaba ganando.

- ¿Te rindes, nenita? Finalmente muestras de lo que estás hecha, miedo y un poco de actuación. No entiendo como pude pelear contra alguien tan patético.

Comenzó a levantarse pero yo queme sus piernas.

- A ver, murciélago, con mi orgullo no te metes.- solté con dolor, mi cuello dolía demasiado.

Elementos [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora