Elementos [EDITANDO]

Capítulo 25 - Riesgos

Luka

Abrí los ojos mientras algunas gotas de sudor recorrían mi frente. Mis manos y piernas estaban amarradas a la silla en la cual me encontraba sentado, no podía escapar, no existía ninguna ventana en la habitación en que me encontraba, ningún rayo de Sol podía alumbrarme

Ni siquiera estaba "recargado", era inútil tener poderes en estas circunstancias.

Sé qué estás ahí, ¿Quien eres?

- ¿Qué? - fue lo único que solté al escuchar una voz en mi cabeza, ¿Estaba volviéndome loco?

No podía recordar bien lo sucedido, aunque las marcas hablaban por sí solas, no necesitaba recordar para notarlo; había luchado contra alguien que podía contra mí, no me sorprendía que pudieran contra mí, sino la forma en que lo hizo. Tal vez Forbia o Edwin, pero no, no tenía quemaduras en mi piel, contrario a eso, tenía moretones y algunos cortes, ¿Quien era ésta persona y como es que nunca antes había luchado contra el o ella?

¿Quien eres?

- Luka, ¿No deberías saberlo si estás en mi cabeza?

Debí suponerlo por lo luminosa que puede ser tu mente

- ¿Quien eres tú?

¿Quién podría ser?

- ¿En serio vas a hacerme pensar? - la voz no contestó - lo tomaré como un sí.

Recuerdo cuando Drake me secuestró, recuerdo mi lucha y luego todo se va a negro, ni siquiera sé donde estoy.

Sé que tienes cerebro, puedo verlo; úsalo.

- Bien, no tengo muchas opciones. Podrías ser Drake tanto como Felicia, alguien con poderes mentales. Tu voz no me dice nada, ya que suena exactamente igual a la mía, ¿Eres chica o chico?

La primera opción

- Eso simplifica las cosas...¿Lottie?

¿Tengo pinta de loca? ¿Te has visto al espejo últimamente?

- Si no eres Lottie, y ese cometario jamás saldría de la boca de Felicia, debes ser Tristana, ¿No?

Diste en el blanco

- ¿Sabes donde estamos?

Gabriel dice que Drake nos tiene capturados, no nos dejará ir, debemos escapar

- Si me consigues un rayo de Sol, en cinco minutos nos vamos de aquí.

¿Tu celda no tiene ventanas?

- ¿Crees que seguiría aquí de tenerlas?

Buen punto

Y la voz cesó, no volví a oír a Tristana por lo que creí fueron horas, ¿Estaría ella lo suficientemente lejos como para gritar y yo no escucharla? Ella solo nombró a Gabriel, ¿Tan solo somos los tres?

Vas a forcejear con las ataduras de tus manos y piernas, debes soltarte

Lo intenté, tanto como pude, mis muñecas y tobillos comenzaron a arder sin mostrar resultados.

- No puedo.

¿No puedes?

- No, ya lo intenté.

Vuelve a intentar, vamos hazlo

- ¿Acaso quieres que me corte el brazo y las piernas? Porque eso sería más fácil.- solté y no recibí respuesta. Al rato ella volvió a hablar.